JERUSALÉN, 16 (EUROPA PRESS)
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha afirmado que no se puede definir a los colonos judíos extremistas como terroristas en medio de una ola de ataques por parte de los mismos contra propiedades privadas y mezquitas palestinas e instalaciones militares del Ejército hebreo.
Netanyahu ha hecho estas declaraciones en respuesta a la lista de recomendaciones propuesta por el Gabinete de ministros para poner fin a esta ola de violencia, entre las que se encontraba la de definir a los ultranacionalistas violentos como terroristas, según ha informado la agencia de noticias palestina Maan.
Pese a que el 'premier' ha rechazado esta definición, ha aceptado otras de las recomendaciones, entre las que se encuentra la emisión de órdenes de arresto contra los culpables de los disturbios, su enjuiciamiento en tribunales militares y dar luz verde al Ejército para que pueda proceder a los arrestos. Todas estas medidas son empleadas de manera legal contra ciudadanos palestinos, pero supone una novedad que pueda aplicarse a ciudadanos judíos.
Hasta ahora, los soldados tenían permiso para arrestar a ciudadanos palestinos a través de redadas --algunas de las cuales se realizan en medio de la noche en sus viviendas-- pero no podían hacer lo mismo con judíos sospechosos de actos vandálicos o violentos. Para ello, tenían que recibir una llamada de socorro, dando tiempo a los culpables de huir antes de que la patrulla pudiera personarse en el lugar.
Para defender su postura, Netanyahu ha comparado a los colonos que atacaron una base militar israelí el lunes, lanzando piedras contra un comandante y su subalterno, rompiendo ventanas y reventando vehículos, con los activistas palestinos que se manifiestan de manera pacífica semanalmente en Bilin contra la construcción del muro de separación y la confiscación de sus tierras.
La diferencia, a su juicio, es que los colonos violentos “son un grupo pequeño que no representa a la gente que vive en Jude y Samaria”, nombre con el que las autoridades hebreas se refieren a Cisjordania. Sin embargo, fuentes de seguridad israelíes han contradicho estas declaraciones al afirmar que el grupo violento, conocido como 'Hilltop Youth' ('Juventud Encumbrada'), cuenta con varios centenares de miembros y tiene el respaldo tácito de una gran parte de los 500.000 israelíes que viven en Cisjordania.
El miércoles, judíos radicales incendiaron la fachada de una mezquita en Jerusalén y pintaron en sus paredes 'Muerte a los árabes', un asalto que ha sido vinculado con un grupo que ya ha atacado varios lugares de culto musulmanes en los últimos dos años.
REPUDIO Y CONDENA
Una postura más dura a la de Netanyahu ha sido tomada por el ministro de Defensa, Ehud Barak, que dijo el miércoles que los ataques contra el Ejército por parte de extremistas judíos deberían ser catalogados como acciones terroristas.
En declaraciones a la Radio del Ejército recogidas por el diario 'Haaretz', Barak dijo que Israel debe decidir si la denominada 'Juventud Encumbrada', formada por jóvenes que han nacido en asentamientos judíos y pertenecen a la extrema derecha, puede ser catalogada y tratada como una organización terrorista.
“Por la forma en que actúan, no hay duda de que tienen un comportamiento terrorista”, afirmó el ministro de Defensa, antes de incidir en la necesidad de definir legalmente este fenómeno violento. “¿Es una organización? ¿Es un grupo de individuos? ¿Cómo pueden ser definidos en conjunto?”, se preguntó.
En este sentido, el presidente israelí, Simon Peres, ha condenado este jueves los ataques llevados a cabo esta semana por habitantes de asentamientos judíos y ha pedido a los extremistas que no den motivos a quienes quieren atacar a Israel.
“Lo que está haciendo esta gente es muy grave”, ha subrayado, según la prensa israelí. “Israel siempre ha estado orgulloso de proteger todos los lugares sagrados. Hoy en día, cuando el mundo musulmán está como está, darles una justificación para atacar a Israel es un desastre y una locura”, ha afirmado.
RESPUESTA DE AL FATÁ
Por su parte, el partido político palestino Al Fatá ha dicho que las políticas “agresivas y provocadoras” de Netanyahu contra los lugares de culto musulmanes y cristianos inflama los conflictos religiosos en la zona.
El portavoz de Al Fatá, Osama Qawasmi, ha dicho que la escalada en el número de ataques por parte de los colonos contra mezquitas “muestra el tamaño del extremismo alimentado por las políticas de Netanyahu, que favorece y protege a estos colonos”.
Por último, ha recalcado que son las políticas del Ejecutivo hebreo las que han motivado a los colonos a incendiar la mezquita Al Nur, en la localidad de Burqa, cerca de Ramala, sólo 24 horas después del ataque contra la mezquita de Okasha, en Jerusalén, según ha informado la agencia oficial de noticias palestina, WAFA.