ABIYÁN, 11 (Reuters/EP)
Unas 200 personas han presenciado este domingo la destrucción de una estatua erigida en Abiyán en honor al presidente interino de Costa de Marfil, Laurent Gbagbo, en una especie de ritual dirigido por las fuerzas del presidente electo, Alassane Ouattara.
“Es la estatua que se construyó cuando Gbagbo llegó al poder para poner a Abiyán bajo su hechizo. Al destruirla estamos liberando Abiyán”, ha explicado el coronel Daniel Dodo, quien al igual que otros soldados de Ouattara vestía una camiseta negra con las palabras “Batallón Místico”.
En el interior de la piedra había unos trapos rojos que habrían sido objeto de un ritual oficiado por un sacerdote del pequeño país africano de Santo Tomé y Príncipe. “El rojo es un color simbólico porque la sangre humana es necesaria para dar poder al amuleto”, ha apuntado Dodo.
Una vez finalizado el acto, los asistentes han celebrado la destrucción de la imagen. “Esto era lo que estaba trayendo desgracias a Costa de Marfil. Ella guardaba su secreto, pero lo hemos eliminado para traer paz”, ha dicho Denis Gonhdene, de 46 años de edad, residente en el barrio de Yopougon.
El país africano, como muchos de sus vecinos regionales, todavía está profundamente dominado por la superstición, por lo que este tipo de rituales son bastante comunes. Estas creencias conviven con el cristianismo y el islam.