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Tenso ambiente en Bangkok tras el rechazo del Ejecutivo a la oferta de los 'camisas rojas'

BANGKOK, 25 (Reuters/EP)

Bangkok se prepara este domingo para más disturbios, un día después de que el Gobierno tailandés rechazara una propuesta de paz de los manifestantes que ofrecían poner fin a sus cada vez más violentas protestas a cambio de elecciones anticipadas.

Los líderes de los 'camisas rojas', partidarios del derrocado ex primer ministro Thaksin Shinawatra, dijeron a miles de sus miembros que se preparen para una operación en su contra y retiraron su oferta para poner fin a una ocupación de tres semanas de la principal zona comercial de Bangkok si el Gobierno llamaba a elecciones en 30 días.

El primer ministro, Abhisit Vejjajiva, cuyo Gobierno de coalición de seis partidos está bajo presión de la clase alta y los realistas para adoptar una línea dura contra los 'camisas rojas', se ha apegado a su oferta de llamar a elecciones en diciembre, un año antes de lo previsto.

Los manifestantes, en su mayoría pobres del campo y la ciudad, retomaron su exigencia de una elección inmediata, la que se prevé que ganarían junto a sus aliados políticos.

Abhisit dijo que la propuesta de paz no era sincera, y estaba diseñada sólo para fortalecer su imagen, pero que no podría ser considerada en medio de amenazas. Las protestas, agregó, están cobrando un costo cada vez mayor a la economía de Tailandia, la segunda más grande del sudeste de Asia.

La ocupación hotelera en Bangkok cayó hasta un 20 por ciento, dijeron operadores de turismo, respecto al 80 por ciento que presentó en febrero, estrangulando a una industria que corresponde al seis por ciento de la economía.

“Tendremos que revisar la tasa de crecimiento nuevamente, especialmente después de este mes y el mes pasado, ya que, como podemos ver, las protestas han tenido un enorme impacto en el turismo”, dijo Abhisit en su discurso televisivo semanal. Sostuvo que el Gobierno tendría que revisar a la baja su previsión de un crecimiento económico de un 4,5 por ciento para este año.

Los manifestantes amenazaron con adoptar medidas más agresivas, incluyendo un sitio contra Central World, el segundo mayor complejo comercial del sudeste de Asia, junto al principal punto de reunión de los manifestantes.

“Si quieren que regresemos el centro comercial Central World seguro, deben retirar a las fuerzas del Ejército de la zona cercana de Rajaprasong inmediatamente”, dijo Jatuporn Prompan, un líder de las protestas. El centro comercial en la intersección de Rajaprasong lleva cerrado desde que los manifestantes ocuparan la zona el 3 de abril.

El ambiente en Bangkok, una ciudad en expansión de 15 millones de habitantes, sigue tenso tras la serie de explosiones de granadas que mató a una persona hace tres días y dejó a otras 88 heridas en un distrito de negocios, un ataque que el Gobierno atribuyó a los 'camisas rojas', quienes niegan ser responsables.

Este incidente tuvo lugar después del gran enfrentamiento del 10 de abril entre manifestantes y Ejército que dejó 25 personas muertas y a más de 800 heridas en los peores actos de violencia política en Tailandia en casi dos décadas.

El Ejército advirtió el sábado de que podría dispersar a la fuerza a los manifestantes que se han parapetado en una zona de tres kilómetros cuadrados de la ciudad, pero dijo que primero quiere separar a los milicianos de las mujeres y niños en el área.

Este domingo, miles de soldados, muchos armados con fusiles de asalto M-16, siguen vigilando a los 'camisas rojas' en varias intersecciones de la ciudad. Manifestantes realistas favorables al Gobierno se reúnen frecuentemente afuera de las barricadas y ambos bandos se arrojan botellas.