Alcibiades García es el presidente de la Asociación de Vecinos y amigos del Valle de Las Rosas en Agulo. En los últimos meses ha saltado la polémica entre este colectivo y el Ayuntamiento de la localidad a razón de no cesión de las llaves del conocido como Teleclub que ha provocado que los afectados hayan organizado una manifestación frente al Consistorio el próximo sábado 18 de abril. Son las siete de la tarde. Quedamos en una cafetería y pedimos dos cafés –el mío con leche, el suyo solo-. Se le nota cansado. Pero no físicamente, sino agotado por lo que él considera “un despropósito” que no sabe cuándo acabará. Sin embargo, tiene las ideas muy claras. Y piensa llevar las reivindicaciones de sus vecinos hasta las últimas consecuencias: “no hubiésemos querido llegar hasta estos extremos, pero no nos han dejado otra solución”.
¿Había necesidad de llegar hasta el extremo de manifestarse frente al Ayuntamiento?
Ha sido el último recurso. No nos han dejado otra opción tras el silencio administrativo que hemos soportado. Cuando empezó el problema, nos llamaron del Ayuntamiento para mantener una reunión. Nunca tuve respuesta. Y así suma y sigue. Es un cúmulo de cosas. ¿Cree que es lo que perseguíamos? No hubiésemos querido llegar hasta estos extremos, pero no nos han dejado otra solución.
¿Tan importantes son unas llaves como para manifestarse?
Mucho. Le pongo un ejemplo. Las Rosas está a seis kilómetros del casco de Agulo. El último escrito del Ayuntamiento nos dice que si solicitamos las llaves con dos días de antelación y por escrito –y siempre y cuando esté libre el local- nos las dejan. Imagine que ocurre algo urgente, o está lloviendo y una persona mayor tiene que esperar al médico en Las Rosas. ¿Lo dejamos en la plaza a la intemperie? ¿No es lógico que hubiera unas llaves en el barrio? O que tenga que atender las quejas o sugerencias de un vecino. ¿Dónde lo hago? Y como ejemplo le podría poner miles. No es una cuestión de peticiones, sino de lógica. ¿Ve normal que tengamos que bajar a Agulo a buscar unas llaves y volver a subir a Las Rosas para mantener una reunión o simplemente ver un partido de fútbol? Y eso que solo lo utilizamos los fines de semana. Entre semana no hay nadie. Yo creo que no estamos pidiendo la luna.
¿Pero de dónde surge todo?
Las fiestas de Las Rosas habían decaído en los últimos años y consideramos que había que recuperarlas y devolverles su esplendor. Con mucho esfuerzo, un grupo de vecinos comenzamos a trabajar no sólo para las fiestas, sino para promover mejoras en el barrio, sobre todo teniendo en cuenta lo alejado que está de Agulo. No había ni bares, ni lugares de esparcimiento. Por eso creamos la Asociación y comenzamos a utilizar el local para diferentes actividades y también como punto de encuentro de los vecinos del barrio. Hasta ahí todo fue bien.
¿Entonces? ¿Qué problema hubo? No termino de entender...
Mire, por dos veces me dijo el alcalde –Néstor López (PSOE)- que no quería asociaciones de vecinos en Agulo. Yo pensé que era una broma. Pero después de constituir la Asociación comenzaron los problemas. Las llaves estuvieron siempre en el barrio y nos las quitaron en 2013 .Nos dijeron primero que si las queríamos, teníamos que pedirlas con 15 días de antelación. Luego la bajaron a 2 días y por escrito. ¡Unas llaves de un local municipal! Pues nada, nos quedamos sin local y empezamos a reunirnos en la iglesia hasta que el párroco nos conminó a no hacerlo ‘tras consensuarlo con el Ayuntamiento’. Luego una vecina nos ofreció un local particular, pues el ayuntamiento va y lo alquila, por cierto creo que aún está vacío. Pues ni local ni iglesia, pues en la plaza del barrio. A ver quién nos impide reunirnos. Ni que estuviésemos cometiendo un crimen. ¿Hablar de los problemas del barrio y plantear soluciones es malo? ¿Dónde está la libertad de reunión?
Pero han creado un consejo de participación precisamente para solucionar este tipo de asuntos con todas las asociaciones del municipio, ¿no?
Salvo que la Ley nos obligue, nosotros no vamos a participar en eso (se ríe). Si hubiese habido tanto afán de asociacionismo hace un par de años, Agulo tendría su club social
¿No está siendo un poco radical?
No. Le hemos pedido al Ayuntamiento por escrito por dos veces que nos dejaran una copia de las llaves. Ninguna nos han respondido. Argumentan que si sirve de tanatorio o de consultorio... Mentira. Es un local anexo, no el que pedimos, que además fue construido por los propios vecinos. Pero es que hay más. No sólo no nos deja ningún local de los tres que hay en el barrio, sino que encima los dos privados que hay los alquila el Ayuntamiento y los tiene cerrados. ¿Eso dónde se ha visto? ¿Así quiere fomentar la participación ciudadana? Nada, habrá que ir a un bar, pedir algo de comer y juntar unas mesas si el día está lloviendo. Ahora en serio, no pedimos tanto, sino que un miembro de la directiva , tenga una copia de las llaves por si hubiera algún imprevisto de última hora que no pueda ser solicitado con antelación y para los fines de semana. Y si el Ayuntamiento tiene algo programado, pues lo posponemos. No hay problema. Además, no me hable de radicalidad. Sé que el alcalde ha llamado a vecinos diciendo que no me dejaba las llaves porque mi padre (que durante 20 años estuvo al frente de la antigua asociación) lo había dejado abandonado. A otro le dijo que habían aparecido cosas rotas y que le habían faltado medicamentos ¿Cree que esto siendo radical?
Parece más una cuestión personal que asociativa. ¿Lo cree así?
Yo no tengo problemas con él. Pero nunca ha estado ahí. Ni siquiera asistió cuando conformamos la Asociación. Y eso que le invitamos, y a los actos, y a las cenas... Y nunca. Sin embargo, el presidente del Cabildo sí vino y siempre que le hemos tocado a la puerta ha respondido. Yo creo que algo de eso tiene que haber, si no, no me lo explico. Quizá le haya molestado vernos con él en los actos que organizamos desde la Asociación.
¿Pero no ha dicho usted que no tiene aspiraciones políticas?
También algunos han dicho que se van y resulta que se vuelven a presentar. Pues quizá haya dicho que no y ahora decida decir que sí. Quién sabe.
Suena a que usted me está confirmando que irá en alguna plancha...
Yo no soy político. Soy un presidente de una asociación que busca el bienestar de sus vecinos. Estamos haciendo muchas actividades. Por ejemplo, con Aider tenemos un proyecto de recuperación de ochenta eras; tenemos prevista la restauración de un lagar; estamos haciendo un proyecto de carretera para acceder a un núcleo incomunicado del barrio; organizamos cursos de informática, motoserrista y tenemos previsto hacer uno de manipulador de alimentos próximamente.
¿Y qué le hace falta a Las Rosas según usted?
Mucho cariño (se ríe). Tenemos una plaza con graves deficiencias de altura -8 metros de desnivel- y donde no hay ni una valla; problemas con el pavimento y con las salidas de agua que van a parar a casa de un vecino... Y un parque infantil. No pedimos mucho, que sea móvil con unos columpios y poco más. Porque tenemos que ir a Vallehermoso o a Hermigua a llevar a nuestros hijos, porque el de Agulo, para colmo, está cerrado y lo abren a partir de las cinco. ¿Lo ve usted normal? Permítame describirle qué es Agulo: macetas, tubos y candados. Está todo cerrado. Y además tenemos en mente un proyecto para recuperar unos senderos y mejorar el acceso al Cepo. Tenemos que mejorar la imagen turística del barrio y nos reuniremos con los propietarios de las casas rurales para trabajar en la promoción de Las Rosas.
¿Qué le pediría ahora al alcalde, rápido, sin pensar?
Ya ni las llaves, sinceramente. Además le digo una cosa. Si él se presenta y gana las elecciones, yo y parte de la directiva dimitimos y por supuesto no hacemos la fiestas. Es imposible hacer un evento de esa magnitud con las relaciones tan deterioradas. Otros cuatro años así no aguanto. Creo que un alcalde debe ser cercano, próximo y dialogante. Juzgue usted mismo si lo ha sido con sus propios vecinos en un barrio que siempre le ha apoyado.
El próximo sábado 18 de abril, a las 17 horas, la Asociación ha convocado una manifestación que dará comienzo en el colegio y terminará en el Ayuntamiento donde se procederá a la lectura de un manifiesto. Este colectivo tiene en la actualidad 102 socios de cuota y 10 honoríficos.