Esta actividad tenía como fin iniciar una campaña de promoción turística que ponga en alza todos los valores de un pueblo que no quiere rendirse al desánimo en tiempos complicados. Con la voluntad de dinamizar la vida económica y social, los organizadores han querido mostrar todo el potencial que La Calera ofrece a los visitantes compartiendo una tarde-noche con un éxito rotundo en participación.
La música inundó los callejones y los aromas y sabores de los mejores platos sirvieron de excusa para el encuentro, el diálogo y el intercambio de gentes procedentes de distintas partes del mundo. Las actuaciones del Grupo Camaleón, los cantautores Maeva y Gabriel y el Dj Steve Brian se sumaron a los talleres de silbo gomero a cargo de Bastian Santos Hesse, el de chácara y tambor dirigido por el músico Juan Mesa y el taller de pintura a cargo de Daniela Schaller.
Otro de los momentos animados de la noche fue protagonizado por el sorteo de premios, tómbola que contó con regalos donados por distintos comercios y empresas del municipio. Todo vino a suponer una puesta en escena de lo que la participación ciudadana puede aportar al desarrollo de la economía local.
Los fondos recaudados se emplean ya en cuajar una experiencia novedosa de diseño de la identidad visual de La Calera y la campaña promocional de este enclave como destino turístico. En un proceso participativo, empresas del barrio conjuntamente con técnicos en diseño, publicidad y participación están trabajando para que La Calera sea un lugar vivo, activo y atractivo, donde poder perderse para encontrar la tranquilidad, la calidez, la creatividad y su historia.
Desde el equipo organizador se quiere agradecer el esfuerzo de cuantas personas, empresas y asociaciones han colaborado en este proyecto. De forma especial, también quiere reconocer la fidelidad de quienes año tras año siguen eligiendo La Calera como destino. En palabras de uno de los empresarios del lugar: “No tenemos clientes, tenemos amigos”.