Curbelo regresa a Hermigua “tras un tiempo de algunas ausencias”
El tiempo amenazaba con lluvia. Estaba gris. Tal vez como algunas caras presentes durante el acto de inauguración de la plaza Victoriano Darias Montesinos. El protocolo estaba preparado. Banda de música a un lado, políticos en el centro y los vecinos al otro. Había mucha expectación tras la polémica montada por el anterior equipo de gobierno municipal, quien acusaba al alcalde, Pedro Negrín, de “arrogarse” este acto, como si no pudieran inaugurarse plazas fuera de tiempo o por otras personas. Pero allí estaban unos y otros. Unos al frente, micrófono en mano llamando a inaugurar “una plaza de todos”, y otros atrás, en silencio.
Tomó la palabra Curbelo para agradecer a los vecinos su presencia y saludarlos de manera especial “tras un tiempo de algunas ausencias”, palabras que sonaron a nuevos tiempos de entendimiento con el gobierno local. Habló de la importancia del enclave histórico donde se asienta la plaza, núcleo originario del pueblo de Hermigua. Agradeció también a Clavijo su presencia en La Gomera. Parece que entre ambos hay sintonía. “Bueno para La Gomera”, dijo.
Por su parte, el alcalde de Hermigua, Pedro Negrín, evidenció en su discurso la importancia de la plaza, la remodelación, los aires de modernidad del lugar, las nuevas posibilidades que se abrían “para todos”, sin hacer exclusiones. Además, relató los orígenes de la plaza, dedicada al médico castrense Victoriano Darias Montesinos y que fue en su origen proyectada por Tomás Machado, arquitecto que también diseñó el consistorio hermigüense.
Fernando Clavijo agradeció a los vecinos su presencia “en uno de sus primeros actos como presidente del Gobierno”. Señaló que se encuentra realizando diferentes visitas a todas las Islas. Eso le honra. Y más eligiendo Hermigua como parada. Fue uno más. Saludó, estuvo en la misa, en la procesión. No le hizo falta tener cerca al guardaespaldas. Notó el cariño de los vecinos. Se nota un cambio en las formas de entender la política. Al menos de fachada, y no la del exconcejal del PP, Héctor Bencomo, que fue pintada de blanca y criticada por el antiguo equipo de gobierno. Ahí no. Ahí reza una placa con el día de la inauguración y nombre de la plaza. Lo demás es política.
