La Residencia de Mayores de Hermigua, el Centro de Mayores de Alajeró y el de Discapacidad de Vallehermoso, dependientes del Cabildo de La Gomera, contarán cada uno con un desfibrilador externo semiautomático. En el día de hoy el presidente de la institución insular, Casimiro Curbelo Curbelo, firmó el correspondiente contrato con los representantes de la empresa suministradora, Atlantic Emergency SLU.
Curbelo señaló tras la firma que se mostraba satisfecho por los avances que durante los últimos años experimenta todo lo relacionado con los servicios sociales, área que siempre ha sido una prioridad en el programa de gobierno. Muestra de este interés es el empeño mostrado para que el Antiguo hospital se convierta en un centro sociosanitario, lo que ha sido calificado por el presidente como “el proyecto más importante dado por el Cabildo en muchos años”
La consejera de Servicios Sociales, Silvia Padilla, afirmó que hoy “damos un paso más para ofrecer garantías a nuestros usuarios dentro de los centros que dependen del Cabildo”. A partir de ahora ante una situación de emergencia, “nuestro personal formado será capaz de estabilizar al paciente hasta que lleguen los servicios sanitarios”. La Consejería insular de Servicios Sociales se ha comprometido a seguir avanzando y dar calidad dentro de los centros que son de su responsabilidad. “De ahí la decisión de contar con estos desfibriladores porque lo que realmente nos importa es la atención a los usuarios así como su calidad de vida, seguridad y protección”.
El desfibrilador externo semiautomático es un aparato electrónico portátil que diagnostica y trata la parada cardiorrespiratoria, siempre y cuando el corazón tenga actividad eléctrica. Son considerados muy eficaces para la mayor parte de los paros cardiacos.
Por medio del contrato firmado hoy el Cabildo asume que los desfibriladores y accesorios que se arrienden se emplearán en caso de urgencia por personal formado y sin que puedan ser usados para fines distintos a los autorizados. Además, el Cabildo deberá mantenerlos en buenas condiciones y que sean utilizados de forma adecuada. Su uso estará restringido a cada uno de los centros, salvo en el caso de necesidad al existir algún peligro.
La empresa se compromete a impartir un curso de formación inicial por parte de instructores del Plan Nacional de Reanimación Cardiopulmonar para ocho personas de cada uno de los centros. La compañía también se compromete a realizar el mantenimiento de la maquinaria, desfibriladores y accesorios. En este capítulo se incluye la revisión periódica a los ocho meses, la sustitución de la batería y expedición del certificado de operatividad inicial y tras cada revisión. Asimismo, se prestará un servicio de asistencia técnica 24 horas y cuando la reparación sea necesaria.