Dos desaladoras han llegado a Lanzarote desde La Palma. El Cabildo de Lanzarote ha anunciado que estas dos plantas móviles pretenden ''mitigar'' la crisis del agua que viene sufriendo la isla desde hace meses.
El presidente de la máxima corporación insular, Oswaldo Betancort, ha insistido en la importancia de la coordinación entre administraciones para solucionar ''la crisis hídrica que está viviendo la isla''.
El Cabildo de Lanzarote tiene previsto destinar más de 90 millones de euros a acometer el Plan de Actuaciones del Agua 2023-2027, presentado a principios del mes de agosto y que contempla la renovación de las infraestructuras hidráulicas de Lanzarote y La Graciosa.
Entre los principales problemas del suministro está la pérdida de casi el 57% del agua que se produce por fugas.
Las desaladoras se instalarán en el Centro de Desalación Díaz Rijo, en Punta de Los Vientos, se pondrán en funcionamiento una vez se firme el convenio entre el Cabildo y el Gobierno de Canarias, y producirán 5.000 metros cúbicos diarios, lo que cubrirá en parte la carencia en la producción de agua potable tras la rotura de uno de los bastidores en la potabilizadora Lanzarote III durante el pasado mes de julio.