Tras su exitosa interpretación de la ópera en concierto ‘Così fan tutte’ de Mozart, bajo la batuta del maestro René Jacobs, en los auditorios capitalinos, la Orquesta Barroca de Friburgo ha iniciado una gira en solitario por varias islas con un repertorio integrado por obras de Bach. Cabe reseñar que es una de las orquestas de cámara más aclamadas por el público y la crítica de los últimos treinta años, sobre todo en el repertorio que presenta en este recorrido, cuya clausura tendrá lugar el próximo martes 27 en el Teatro Circo de Marte, en La Palma, dentro del 37 Festival de Música de Canarias (FIMC), indica en una nota de prensa la organización del festival.
La Orquesta Barroca de Friburgo, añade, representa una de las mejores agrupaciones historicistas que existen. Su sonoridad, calidad técnica, empaste, equilibrio, dominio de las dinámicas y color preciosista, así como su implicación y capacidad de interactuación son las razones que hacen que esta orquesta sea alabada mundialmente, subraya. Esto supone el triunfo de una forma de concebir la música desde el compromiso, sin gestos efectistas, desde el riguroso conocimiento y asumiendo que solo el trabajo continuado y en conjunto es capaz de revelar los compases más extraordinarios, apunta.
Las entradas para el concierto están disponibles en www.festivaldecanarias.com, donde también se puede descargar el programa de la gira, así como en la web del Teatro. El concierto se inicia a las 20.00 horas y se desarrollará tal y como estaba programado, ya que el aforo en espacios de cultura estable de titularidad pública es el mismo para los tres primeros niveles de alerta de prevención sanitaria.
Obras de Bach que incluye el programa
El programa que interpreta en esta edición del FIMC se abre con la Obertura nº 2 en si menor BWV 1067, que incluye la popular Badinerie. Una obra en la que la cuerda se opone a la flauta solista en una especie de concierto, aunque su forma no es todavía en tres movimientos, característica de períodos posteriores.
Los conocidos como Conciertos de Brandeburgo, indica, se llaman en realidad “Conciertos para instrumentos diversos”, y es esa diversidad precisamente la clave de su interpretación en este programa. El Concierto nº 4 está escrito para violín y dos flautas solistas contra un cuerpo de cuerdas. Y el nº 5 es un buen lugar para empezar a explorar la música barroca, ya que la forma del concierto en sí, con su alternancia de solistas y orquesta, fue un producto de esta época. Cierra el programa el Concierto para clave, cuerda y bajo en re menor BWV 1052, uno de los mejores conciertos de Bach, que en palabras de Jones “transmite una sensación de gran poder elemental” y se hermana con la música de Vivaldi.
Orquesta Barroca de Friburgo
Formada por 30 músicos, “dueños” de la orquesta, señala, la historia de la FBO comienza en 1985, cuando algunos jóvenes estudiantes de la Escuela de Música de Friburgo (principalmente de la clase de violín del profesor Rainer Kussmaul) decidieron estudiar en detalle la práctica de interpretación históricamente informada y fundar un conjunto para este propósito.
Pronto se convirtió en una de las orquestas más solicitadas en la escena de la música antigua y ganó fama internacional. Se inició una intensa actividad de conciertos bajo la dirección de los dos directores artísticos Gottfried von der Goltz y Petra Müllejans, que llevaron a la orquesta a México, Australia, Japón y Estados Unidos. La Orquesta ofrece cerca de cien representaciones al año en diferentes formaciones, desde cámara a orquesta de ópera: un ensemble autogobernado con sus propios conciertos de abono en el Concert Hall de Friburgo, Liederhalle de Stuttgart y Philharmonie de Berlín, y con giras por todo el mundo.