La Palma, en un abrumador porcentaje, sigue sin poner en producción sus tierras de labor. Según los datos del último Mapa de Cultivos de la Isla, que se corresponde con la campaña del año 2008, de las 18.310,30 hectáreas registradas en el catastro como superficie agrícola, 10.989,70 no se cultivan; es decir, el 60% de la reseñada extensión. O sea, sólo se siembran 7.320 hectáreas, el 40% del campo cultivable.
(Cuadrante de la superficie agraria de la Isla del avance del Plan General de Ordenación (PGO) de Mazo)
La mayor parte del potencial agrario de la Isla continúa en barbecho. O más exactamente, se mantiene en “un abandono prolongado”. La crisis económica ha provocado que se “hayan puesto de nuevo en producción para el autoconsumo muchos huertos familiares situados al lado de las viviendas, pero en las medianías únicamente ha cambiado algo en las zonas húmedas de los montes, donde es posible plantar, sobre todo papas, sin necesidad de regar”, indicó a LA PALMA AHORA un técnico en la materia. En este sentido, subrayó, el cultivo de este tubérculo, básico en la dieta local, “se ha disparado”.
La mencionada fuente apuntó que, pese a que el Mapa de Cultivos de la Isla data del año 2008, “las variaciones que, desde esa fecha, ha registrado son poco significativas”.
Garafía es el primer municipio de la Isla por superficie agrícola total (2.585,80 hectáreas) y por superficie agrícola no cultivada (1.904,60 ha.), seguido de Mazo, con 2.452,30 ha y 1.700 ha, respectivamente.