La Asociación Palmera de Agricultores (Aspa) ha mantenido recientemente una reunión de trabajo con representantes del sector platanero de la Isla, en este caso de las cooperativas Agusa, Covalle, Cupalma, La Prosperidad, Teneguía y Volcán de San Juan, para abordar “la producción histórica de plátano de Canarias en la pasada campaña agrícola y el incremento de la destrucción de fruta como consecuencia la baja rentabilidad, que está provocando que los profesionales del sector”, ante “una nueva crisis” de precios, “estén replanteándose su futuro”, indica en una nota de prensa.
Señala que “con esta peligrosa deriva de inestabilidad acentuada en la pasada campaña, las entidades del sector hemos de asumir que sin mano de obra profesional bien remunerada el sector se volverá cada vez más insostenible y debemos adoptar las medidas oportunas que garanticen rentabilidad y evitar su salida hacía otras alternativas laborales”.
Apunta que “entre los asuntos tratados y acuerdos alcanzados sobre los que hay consenso y, se considera, no admite dilación, se encuentran la revisión de los estatutos de Asprocan (Asociación de Organizaciones de Productores de Plátanos de Canarias) para que sus acuerdos no precisen unanimidad de sus seis miembros; un estudio para un implantar un modelo alternativo al actual sistema de retirada de fruta (más conocido como pica) al objeto de reducir sus costes de gestión y su afección al medio ambiente y, en relación con las explotaciones sepultadas o que no se han podido poner en producción por la erupción volcánica, la necesidad de que continúen las compensaciones por pérdida de renta hasta su recuperación total”.
Aspa, concluye, “en las circunstancias actuales y, en adelante, trata de acercar posturas con todas las Organizaciones de Productores y cuyas diferencias nos están impidiendo centrarnos en los objetivos lógicos a alcanzar en una actividad comercial de éxito”.