La Asociación para el Desarrollo Turístio (Asdetur), en una nota de prensa, señala que “La Palma muestra una baja tasa de fidelización turística y solo el 35,2% de los turistas que escogieron este destino en 2015 habían visitado con anterioridad la Isla”. Indica que “así lo revela, en la primera de sus seis entregas, el Estudio sobre el peso del turismo en la economía palmera elaborado por la Cátedra de Turismo de la Universidad de La Laguna (ULL), CajaCanarias y Ashotel en el marco de un convenio de colaboración firmado con la Asociación para el Desarrollo Turístico de La Palma”.
Apunta que “este porcentaje del 35,2% que repite destino vacacional en La Palma es un 14,8% más bajo que en el del resto de las islas, donde el grado de fidelización turística se sitúa en el 50%”. Añade “este dato se completa con otro sustancialmente llamativo, que subraya que ‘del total de los turistas que han visitado anteriormente La Palma y deciden volver al archipiélago, solo el 8% escoge regresar a la Isla’, un porcentaje que en el caso de Tenerife y Gran Canaria es notablemente superior, del 32% y 31%, respectivamente”.
En la nota se señala que “el primer documento elaborado por la Cátedra de Turismo de la ULL a partir del análisis de fuentes de información estadística, especialmente de la información que recopila el Instituto Canario de Estadística (Istac), analiza la coyuntura turística de La Palma desde la perspectiva a largo plazo” y concluye que “la capacidad de fidelización del alojamiento comercial en La Palma es preocupantemente baja”.
Añade que “esta primera fase del estudio, en el que han participado hasta ocho investigadores de la Cátedra de Turismo de la Universidad de La Laguna”, afirma en sus conclusiones que “mientras que en el resto de destinos canarios la actividad turística ha sobrepasado los niveles previos a la crisis de 2007-08, e incluso se baten algunos máximos históricos anteriores a 2001-03, en La Palma aún no se ha recorrido ni la mitad del trecho necesario para volver al cénit alcanzado a finales de los años 90”. “De hecho, atendiendo a la evolución en los últimos cinco años encontramos mejorías similares a la actual que han venido seguidas de abruptos retrocesos. También es preciso tener en cuenta que La Palma está aprovechando una coyuntura muy favorable para Canarias en el mercado turístico internacional”, indica el informe.
En el marco del Convenio suscrito entre la Cátedra de Turismo de la ULL y Asdetur, “se está llevando a cabo un análisis detallado de las pautas de repetición de visitas a La Palma de los turistas palmeros, en comparación con las que se registran en las restantes islas”. En ese contexto, el estudio afirma que “el balance global del periodo 2000-2015 es claro: Con respecto al año 2000 ha tenido lugar un descenso del 7% en el número de pasajeros de procedencia extranjera llegados a La Palma por vía aérea. Este porcentaje contrasta con la variación positiva de este indicador experimentada en Fuerteventura, Lanzarote, Tenerife y Gran Canaria y que en el caso concreto de Fuerteventura aumenta un 51%”.
Por otro lado, el Estudio indica que se ha producido “un cambio crucial en la composición por procedencias de la clientela turística de La Palma”. Así, “antes del año 2000 los alemanes copaban en torno al 90% de las llegadas internacionales a la Isla, mientras que con posterioridad a 2010 son menos de la mitad de la afluencia extranjera. Como resultado de este cambio, los parámetros de la demanda a los que debe ajustarse el sector se han transformado de forma sustancial”. En referencia a la evolución de la clientela alemana, el estudio de la Cátedra de Turismo indica que “su retroceso durante la década pasada se ha vinculado a la dinámica económica del país y, de hecho, no se produjo únicamente en La Palma; los alemanes también sufrieron importantes retrocesos en las restantes islas turísticas (Lanzarote, Fuerteventura, Gran Canaria y Tenerife), que durante los años 2009 y 2010 recibieron menos del 80% de pasajeros procedentes de Alemania de los que habían recibido en 2000. Sin embargo, eso no explica que, durante esos mismos años, en La Palma el índice haya bajado casi al 60% y que, posteriormente, mientras que en el resto de islas se ha vuelto prácticamente al nivel de 2000, en La Palma solo en 2012 y 2015 se ha conseguido llegar al 70%”.