Le atraen los residuos desde el punto de vista artístico. Hace originales carteras con papel de revistas, broches con latas o pulseras con bolsas de papas. La artesana Raquel Abad, una madrileña que reside en La Palma desde hace ocho años, no tira nada, aprovecha todo lo que los demás depositan en el contendor amarillo. “Nunca me ha gustado tirar cosas, voy acumulando objetos como si tuviera una especie de síndrome de Diógenes, pero al final estos residuos los convierto en arte”, ha señalado a LA PALMA AHORA. Esta joven creadora ha participado en la I Feria Juvenil de Santa Cruz de La Palma que se ha celebrado este sábado en la barriada de Los Pescadores organizada por el Ayuntamiento de la capital.
(Raquel confecciona pulseras, collares y pendientes con material reciclado)
Raquel, desde hace unos meses, se dedica profesionalmente a la artesanía, aunque reconoce que vivir de ella “es difícil”. “Llevo varios años estudiando los materiales de reciclaje, pero vendo mis propios artículos desde hace muy poco tiempo en ferias y mercados”, señala. En la actualidad, trabaja en la creación de una página web (www.ladytrash.com) para integrarse en una plataforma gratuita de artesanos que le permite promocionar y comercializar su producción. “Es difícil vivir del arte, pero lo estoy intentando”, reconoce.
El de Raquel es un arte comprometido con el medio ambiente que no consume recursos. “Las piezas las confecciono con los residuos que voy adquiriendo, y así sé con seguridad a dónde van a parar, porque cuando los tiro al contenedor amarillo les pierdo la pista”, señala. “La bolsa de papas que consumo sé que terminará en una pulsera, las latas, en un broche o el papel de la revista que he leído, en una cartera”, insiste. “Yo guardo todos los residuos de uso doméstico como envases de pasta, de patatas, de galletas, botellas de plásticos, latas? También lo que pillo por ahí, siempre he recogido cosas que me encuentro como vasos de plástico, y al final todo lo uso”, asegura.
(El papel de las revistas que lee Raquel se convierte en originales carteras)
Raquel cree que en la sociedad actual no hay mucha conciencia del reciclaje, que falta mucho camino por recorrer, pero aún así, dice que “cada vez” hay más artistas que están haciendo uso de materiales reciclados para sus creaciones. “En Europa se percibe un impulso al reciclaje”, comenta.
Crear con residuos es “lo que me apetece hacer y, además, es una actividad que va unida a esa visión ecologista que defiendo, de compromiso con el medio”, apunta esta joven creadora que también siente un especial interés por el mobiliario, lo que le ha llevado a estudiar diseño de muebles en la Escuela de Arte Manolo Blahnik.
Raquel ha impartido talleres sobre el reciclaje en el arte en institutos y en la reciente feria de arte que se celebró en agosto en Los Cancajos. “Pretendo crear conciencia de la importancia del reciclaje, pero también demostrar que con una cosa se puede hacer otra, fomentar la creatividad con materiales poco convencionales en el arte”, concluye.