Vaya osadía de pregunta, pero tiene una justificación. Ya me han escuchado en varias ocasiones que las personas en general, y los emprendedores en particular, tenemos que pensar más, dedicar más rato, más recursos, más tiempo, en definitiva, a pensar en estrategias, acciones, mejoras para con nuestras unidades de negocio. Normalmente, en mis consultorías cuando pregunto a los emprendedores o gente de empresa por qué no dedican más tiempo para pensar, la respuesta es casi siempre la misma: “porque no tenemos tiempo”.
Pues bien, en el verano hay tiempo para muchas cosas; leer ese libro que tiene el marcador por la parte de arriba de otro color de los meses (quizá del verano pasado) que lleva señalando un fin imposible. Hacer deporte, no pudiste en todo el año, pero ahora ves que a la “operación bikini” le falto eso, tiempo. O ir a la Cucaña de las fiestas del Puerto Espíndola para ver cómo unas cuantas personas valientes se ponen de color más oscuro que el marcador de libro ese.
¿Por qué no dedican tiempo en verano para pensar? Sencillamente porque no lo tienen ustedes entre sus prioridades, porque nadie les ha explicado qué beneficios puede llegar a tener.
Aunque dependerá de dónde tengan ubicadas sus empresas, sus comercios, si son autónomas, si están “a pie de playa”, etc., las personas emprendedoras tienen una ocasión sin igual en verano para repasar su estrategia. Yo animo a las empresas a que no se rijan por el año fiscal, ese que va de 1 de enero a 31 de diciembre, sino que utilicen el calendario “escolar”, así tendrán más tiempo para PENSAR, en lo que va desde finales de junio hasta la primera semana de septiembre. No doy mucha fe en que en plena Navidad piensen ustedes más lejos de los mantecados, los regalos de reyes y, a partir de enero, a los tres objetivos (personales, que no empresariales) que se pone cualquier español de bien para el año: aprender inglés, apuntarse al gym y dejar de fumar.
Después del (necesario) rapapolvo, les hablaré de estrategia, de una definición propia, prometo que sencilla, sobre este término tan importante.
La estrategia podríamos decir que es un Plan de Acción o un conjunto de decisiones (cuidadosamente pensadas) que están diseñadas para alcanzar objetivos específicos y asegurar el éxito a medio / largo plazo. Por lo tanto, y da igual el tamaño que tenga la empresa, tienda o lo que sea, es la guía que dirige cómo la persona emprendedora utiliza sus recursos, habilidades y oportunidades para diferenciarse de la competencia y satisfacer las necesidades de los clientes de manera efectiva.
Además, deberá llevar un timing en el que se especifique la fecha en la que se llevará a cabo cada acción, esto les servirá de guía para poder ir cumpliendo acciones. Les ayudo con algunas preguntas:
¿Qué campañas lanzaré a lo largo del año?
Pueden poner no solo nombre a las campañas (eso es lo fácil y prácticamente se hace sin pensar), sino beneficios para el cliente, fechas, tipología de descuento… Incluso pueden ir adelantando los diseños y creatividades para que, cuando indique el timing, lanzar la misma.
¿Qué acciones de venta cruzada puedo realizar?
Primero les dejo deberes, que le pregunten a Google, a TikTok o a Chat GPT qué es esto de la “venta cruzada”.
¿Con qué recursos contaré a nivel Marketing?
Igual que tenemos un presupuesto para comprar materias primas, para la casa, para invertir en arreglos, etc., no solemos pensar en una de las patas más importantes de cualquier unidad de negocio, el marketing…
¿Cómo voy a potenciar mi valor diferencial en redes sociales?
Primero, ¿saben ya cuál es su valor diferencial? Y no me vengan con eso que dice algo así como “cumplimos las necesidades de nuestros clientes”, eso es algo más que lógico. Una vez que tengan esto claro, les tocará pensar cómo lo van a explotar en redes, cómo lo van a enseñar al público objetivo.
¿Qué está haciendo mi competencia o empresas del sector en otras localizaciones?
No para copiar, que sé que les gusta mucho, sino para mejorar, para aplicar a sus empresas. ¿Qué está funcionando en otra isla, en otra ciudad, en la península o en Londres? ¿Lo podría aplicar mejorándolo y/o adaptándolo en mi población?
Bueno, les dejo que tengo que preparar la maleta; mañana parto a una Málaga espero que más cálida que la caliente Córdoba desde donde les escribo, y menos húmeda que La Manga del Mar Menor que viví la semana pasada. Sí, tres destinos para teletrabajar que son de mis favoritos, y… ¿saben qué? en los tres, además de desconectar que ando de “vacaciones”, como buen emprendedor me está dando tiempo para PENSAR en la estrategia de lo que estar por venir, porque verano (aunque lleve las mismas letras) no es igual que envaró, que significa entorpecer, entumecer o impedir el movimiento de algo, al contrario, vivan el verano de la estrategia y no el que les impida el movimiento de avanzar en sus negocios…
Un saludo.