Espacio de opinión de La Palma Ahora
Seguimos sin conocer el potencial geotérmico de La Palma
La geotermia para la generación de electricidad en La Palma puede jugar un papel clave en el objetivo de alcanzar la independencia del petróleo y del monopolio, por ser una renovable que aporta estabilidad al sistema, junto a los otros recursos renovables convencionales que tenemos en la Isla, dentro del proceso de transición energética en el que nos encontramos.
El hecho de en Canarias y en La Palma después de unos cuarenta años de estudios e investigaciones geotérmicas todavía no se haya terminado de evaluar el potencial de este recurso, es un buen dato para poner en evidencia cuales han sido, hasta ahora, los objetivos de la política energética del Gobierno canario y el Ministerio de Industria de Madrid en las islas. Apoyar a los combustibles fósiles, el ejemplo del gas en Tenerife es buena prueba de ello y un abandono intencionado de las tecnologías renovables cuando ya están en condiciones técnicas y económicas de competir con los combustibles fósiles.
La tecnología de geotermia de alta entalpia se conoce desde hace más de un siglo, fue en la localidad italiana de Lardarello de la Toscana donde en 1913 se puso en funcionamiento, por primera vez, una central geotérmica para generar electricidad y en 2013 se inauguró en dicha localidad el museo de su centenario. A lo largo de este tiempo se ha ido perfeccionando dicha tecnología y observamos como en islas volcánicas como la de San Miguel de Las Azores, con unos 135.00 habitantes y un poco mayor que La Palma, cubre el 50% de demanda con geotermia y otros territorios insulares como Hawái o Guadalupe llegan al 30% de sus necesidades eléctricas. Mientras aquí, de brazos cruzados, esperando la intervención divina. Nada que ver con otras épocas en la Isla, a finales del XIX, cuando un grupo de vecinos de Santa Cruz de La Palma, en un contexto de muchas más dificultades que ahora, tuvieron la iniciativa de constituir la entidad El Electrón y, después de conseguir la autorización municipal y de la comunidad de aguas de La Encarnación que gestionaba el caudal del barraco El Río, ponen en funcionamiento la central hidroeléctrica que encendería la primera bombilla de Canarias y la tercera de España, después de Barcelona y Madrid. Y todo esto en unos dos años.
Sí, ahí está la realidad, 45 años después de la última erupción en Fuencaliente –La Palma- seguimos sin conocer el potencial geotérmico de la Isla para la generación de electricidad. Una energía renovable gestionable que nos permitiría reducir la dependencia del petróleo, al mismo tiempo que aporta estabilidad al sistema para la penetración de renovables, no gestionables, abundantes como son la eólica y solar en la Isla, pero también abandonadas porque llevamos décadas esperando para que se amplíe la capacidad la red de transporte para evacuar la energía producida en sus correspondientes instalaciones. ¿Dónde han estado y qué están haciendo los responsables políticos de esta deplorable situación con respecto a los recursos energético de la Isla?, mientras no para de aumentar la dependencia del petróleo, caro y contaminante, con unos sobrecostes en el sistema insular del 200%. Han perdido el sentido común y en buena medida la decencia.
En estos últimos años el sistema energético insular lo que ha hecho es aumentar la dependencia del petróleo con el abandono de la central mini hidráulica del Salto de Mulato que lleva sin funcionar 12 años, símbolo de la soberanía energética perdida, porque desde finales del XIX hasta la década de los sesenta del pasado siglo el agua de La Caldera y de los Nacientes de Marcos y Corderos constituyeron la base del abastecimiento eléctrico de La Palma.
Hoy de cara al cambio de modelo energético en el que nos encontramos, el agua como recurso energético, tanto en su vertiente de centrales hidroeléctricas fluyente como reversible, junto al calor subterráneo de los volcanes de Cumbre Vieja pueden constituir, como tecnologías gestionables, la base para reducir a la mínima expresión el petróleo, y dar un paso importante para la soberanía energética de la Isla. Siempre se nos dice, desde las eléctricas y sus cómplices los gobiernos de turno, a los que apostamos por una isla 100% renovables, que el sol y el viento, siendo recursos energéticos importantes, no aportan estabilidad al sistema insular, para justificar que es imposible prescindir del petróleo, pero son ellos mismos los que tienen abandonada las renovables que sí aportan gestionabilidad como son la geotermia, la hidráulica (Salto de Mulato) y la solar termoeléctrica, entre otras y, sobre todo, tienen más abandonada, aún, la tecnología más sostenible de todas y que nos facilita la consecución del objetivo de la autosuficiencia energética insular como son el ahorro, la eficiencia y las renovables de generación distribuida representada en el autoconsumo con balance neto.
Con motivo de la Noche Europea de los Volcanes celebrada en Fuencaliente el 30 de septiembre pasado, en la que participó la Px1NME, pudimos escuchar a uno de los mejores especialistas en geotermia, José Albert, en la que dejó claro algunos aspectos relacionados con esta disciplina en relación al potencial geotérmico de La Palma: es la isla canaria, junto a la de El Hierro, más joven, en periodo de construcción y que mayor número de erupciones ha tenido en los últimos 600 años; las investigaciones geotérmicas realizadas, aún sin concluir, indican que entre los 2.000 y 3.000 metros de profundidad se encuentra la zona magmática con la temperatura adecuada para que, una vez trasladado este calor a la superficie, podríamos aprovechar para la generación de electricidad. Pero falta por terminar de evaluar este recurso, su viabilidad técnica y económica. ¿A qué esperamos?.
La Px1NME, después de mantener varias comunicaciones con el Cabildo y con INVOLCÁN, el presidente y vicepresidente de la institución insular han quedado en formalizar un convenio entre el Cabildo de La Palma y el ITER, al que pertenece Involcán, para terminar de valorar el potencial de este recurso tan importante para la transición energética en la Isla. Esperamos que esta vez el Cabildo sea diligente y nos sorprenda asumiendo su responsabilidad en cumplimiento de sus propios acuerdos, el institucional de enero de 2007 por la autosuficiencia energética con renovables y siga el ejemplo de los fundadores de El Electrón.
Plataforma por un nuevo modelo energético de La Palma
La geotermia para la generación de electricidad en La Palma puede jugar un papel clave en el objetivo de alcanzar la independencia del petróleo y del monopolio, por ser una renovable que aporta estabilidad al sistema, junto a los otros recursos renovables convencionales que tenemos en la Isla, dentro del proceso de transición energética en el que nos encontramos.
El hecho de en Canarias y en La Palma después de unos cuarenta años de estudios e investigaciones geotérmicas todavía no se haya terminado de evaluar el potencial de este recurso, es un buen dato para poner en evidencia cuales han sido, hasta ahora, los objetivos de la política energética del Gobierno canario y el Ministerio de Industria de Madrid en las islas. Apoyar a los combustibles fósiles, el ejemplo del gas en Tenerife es buena prueba de ello y un abandono intencionado de las tecnologías renovables cuando ya están en condiciones técnicas y económicas de competir con los combustibles fósiles.