Superando el dolor: reflexiones de empatía

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Llevo desde el martes por la noche pensando en que, a pesar de que mi corazón me pide escribir, no sé si tengo derecho a expresar lo que siento. Mi consternación y dolor no es comparable al de los afectados ni al de sus seres queridos y creo que ese hecho me quita legitimidad para hablar.

Hoy, sólo puede ser día de empatía, de reflexionar sobre cómo cada uno de nosotros interioriza el dolor y cómo puede reaccionar de manera que sea útil para sí mismo y para la sociedad.

Ya se van objetivando una serie de decisiones inadecuadas que se dieron en las horas previas a la gran desgracia. Una cosa es el fenómeno natural de la gota fría y otra es la sucesión de respuestas que las personas y la administración fuimos dando.

No sé en qué momento se realizará una evaluación del protocolo que queremos suponer que existe cuando se produce un fenómeno natural, de la envergadura del que se estaba produciendo en el interior de la provincia de Valencia, el martes pasado. Posiblemente esa evaluación irá seguida, de comprobar quién y cómo lo siguió de forma correcta y quién no. Posteriormente se pedirán responsabilidades.

Lo triste es que por mucha responsabilidad que se solicite e incluso se asuma, eso nunca reparará todos los daños que no sean materiales. El dolor no tiene precio. El dolor deja cicatrices que no se borran, ni se diluyen. Puede que llegue el día en que ese dolor no sea agudo, pero no desaparecerá.

Quisiera poder extender un velo de cálido afecto sobre todas esas personas que sufren. Quisiera poder dar fuerzas a todas las personas que se esfuerzan por hacer el milagro de que la vida vuelva a la normalidad. Quisiera poder transmitir esperanza cierta y verdadera para aliviar el dolor que en este momento tienen tantos afectados. Quisiera... quisiera...tantas cosas quisieran para hacer el bien, que me siento impotente ante tanta necesidad y tan poco, lo que puedo ofrecer de verdad.

Hoy, será mi empatía, mi apoyo en la medida que pueda e intentaré centrarme sólo en las personas. El análisis sobre las actuaciones de las diversas administraciones y autoridades, lo dejaré para cuando mi mente esté fría.