Breña Baja celebró el pasado sábado el II Día del Vecino con una variopinta jornada que ha incluido más de once horas de actividades en el acuartelamiento de El Fuerte. Se festeja concretamente el 384º aniversario de la fundación del municipio, que tuvo lugar el 20 de noviembre de 1634, fecha en que se produjo la división administrativa con Breña Alta, se informa en nota de prensa.
Los actos comenzaron a las 08:30 horas con una Ruta Ambiental por la Costa de Breña Baja, de la mano del Club de Caminantes El Atajo, que concluiría en la Playa de Los Cancajos. Las primeras horas de la mañana siguieron protagonizadas por el deporte, con la celebración del IV Cross Militar Extreme, en el que Miguel Caballero se impuso con claridad al resto de participantes.
Otro de los platos fuertes fue la celebración del encuentro literario con Héctor José Rodríguez, escritor local que presentó su obra Durante el preticor, dentro del programa Noches de Sal que viene impulsando todos los últimos sábados de mes el área de Cultura que dirige Ana Trujillo. “Encontrar estos espacios de unión para nuestras vecinas y vecinos, para todas las edades, con actividades de naturaleza tan diversa, refuerza nuestros vínculos comunitarios, nuestra identidad como municipio y como pueblo”, considera Trujillo, también edil de Participación Ciudadana.
La segunda edición del Día del Vecino acogió también al XIV Concurso de Mieles de La Palma, un encuentro ya tradicional que celebró por la mañana la sesión de cata frente al jurado, y por la tarde entregó sus premios. Los apicultores Alejandro Calero, de El Brezal (Breña Alta) y Juan Yoni Afonso, de Montes de Luna (Villa de Mazo) obtuvieron sendos galardones en las baterías de Miel de monte y Miel de costa, respectivamente, entre veintiuna muestras participantes. La tradición trata de transmitirse a nuevas generaciones, de ahí que, de forma complementaria, se haya celebrado el certamen de dibujo y pintura El mundo de la abeja y la apicultura.
Durante la mañana, tuvo lugar también la segunda edición del Concurso de Tortilla y el maridaje de queso y mieles de La Palma, así como un almuerzo vecinal, al que siguió el musical infantil La Superabuela.
La arriada de Bandera y las actuaciones musicales de la Agrupación Folklórica Alfaguara y el Taller de Percusión, pusieron colofón a la celebración. “Es muy bonito compartir días así con la gran cantidad de vecinos que han querido convivir y participar en las diferentes actividades. El tiempo ha acompañado, las instalaciones son inmejorables, sólo nos queda pensar ya en la próxima edición para que sea aún mejor”, agradeció el alcalde Borja Pérez.