El Ayuntamiento de Los Llanos de Aridane, a través de la Concejalía de Limpieza y en colaboración con las diferentes formaciones políticas, ha culminado el proceso de renovación de la ordenanza municipal que regula el depósito de basura y el servicio de recogida de residuos urbanos, informan en una nota de prensa. El objetivo de la reforma, que entra en vigor hoy miércoles, no es otro, tal y como señala el edil responsable del servicio municipal, José María Rivera, que el de “convertir a Los Llanos de Aridane en un municipio limpio, cuidado y capaz de ofrecer la mejor imagen posible a residentes y visitantes”.
La ordenanza municipal regula tanto la limpieza y el uso de la vía pública, como todos aquellos aspectos relacionados con la gestión de residuos domésticos y comerciales, los procedentes de la recogida selectiva, así como el régimen de infracciones y sanciones, entre otras cuestiones. Insistió en que se trata de un proceso en el que “todos los aridadenses juegan un papel activo y requiere de su compromiso y colaboración con pequeños gestos cotidianos” que, a juicio del concejal, “contribuyen decididamente a mejorar el estado de limpieza y mantenimiento general del municipio, tanto en el casco urbano como en los diferentes barrios y zonas del litoral”.
Entre las modificaciones, el edil resaltó la importancia de evitar colocar basura fuera del contenedor, al menos mientras éste se encuentre vacío o tenga capacidad, dejarla encima de la tapa del contenedor o no cerrar la misma una vez se tire la bolsa. Además, se recomienda a los aridanenses utilizar doble bolsa para evitar su rotura y, por tanto, la aparición de manchas, malos olores e insectos en el entorno en el que se ubica cada contenedor. Extraordinariamente, y en el caso de que el volumen de residuos que contengan los mismos impida colocar directamente la bolsa en su interior por hallarse saturados, se deberá colocar un cartón debajo de la bolsa antes de depositarla en el suelo para evitar manchar directamente la vía pública.
José María Rivera destacó que Los Llanos de Aridane cuenta con cerca de 800 contenedores, 287 de los cuales son de recogida selectiva de vidrio, cartón, envases ligeros, aceite vegetal y ropa y calzado. Añadió que el municipio genera más de 7.000 toneladas de residuos domésticos al año cuya adecuada gestión se realiza en colaboración con el Consorcio Insular de Servicios. Una labor que además de la inversión económica anual que asume el Ayuntamiento no solo en las labores de recogida sino de limpieza de contenedores y sus zonas anexas, requiere según el concejal de “grandes dosis de planificación y, sobre todo, de mucha colaboración por parte de la ciudadanía aridanense”.
El edil valoró que en los últimos meses se ha llevado a cabo un proceso de reestructuración del servicio municipal con un calendario de trabajo que permite atender periódicamente las diferentes áreas municipales, si bien “todo esfuerzo sería insuficiente sin la implicación y concienciación de los vecinos”. A ello, se suma la campaña comercial puerta a puerta que, en estrecha colaboración con el pequeño y mediano comercio del municipio se lleva a cabo dos días en semana y que permite recoger una media anual de 126 toneladas de cartón.
José María Rivera explicó que la normativa municipal contempla sanciones por incumplimiento que van hasta los 300 euros en el caso de las leves, desde los 301 a los 600 euros en los casos graves y de 601 a 3.000 euros el caso de expedientes de mayor gravedad, aunque considera que las labores de sensibilización y concienciación pueden resultar “más efectivas” y confía en la colaboración ciudadana con el objetivo de mejorar la convivencia, así como la conservación y las condiciones de salubridad en el municipio.
La prohibición de tirar, depositar o verter en la vía pública toda clase de residuos, tanto en estado sólido como líquido, así como masticables y sus envoltorios, específicamente chicles, chupachups, caramelos y similares, la de arrojar desperdicios desde los vehículos tanto parados como en marcha, así como desde balcones o terrazas incluida el agua de riego de macetas o jardineras y la obligatoriedad de apagar los cigarrillos u otras materias incandescentes antes de depositarlas en las papeleras públicas son otros de los aspectos recogidos en la normativa.
Escupir y satisfacer las necesidades fisiológicas en la vía pública, abandonar residuos voluminosos como muebles, enseres o electrodomésticos, alimentar a los animales, especialmente palomas, perros o gatos abandonados, a excepción de las colonias controladas, arrojar octavillas o materiales publicitarios al suelo o colocarlos en los vehículos estacionados en la vía pública, paredes, muros o farolas salvo en los lugares habilitados por el Ayuntamiento para los anunciantes, también podrá ser objeto de denuncias.
La nueva ordenanza regula, además, que no se podrá depositar basura o desechos antes de las 20:00 horas ni en vísperas de festivo, aun cuando esta operación se realice en los contenedores ubicados en las calles y vías municipales, si bien los contenedores de recogida selectiva de vidrio, papel, cartón y envases ligeros no estarán sujetos a ningún horario.