Unión Bagañeta (UB-CC), en un comunicado, señala que “la alcaldesa de Tazacorte, al parecer, encaja muy mal las críticas y se dedica a tomar ciertas medidas como revancha”. En esta ocasión, precisa, “la medida empleada fue el corte del agua de la sede de Unión Bagañeta”. “Ahora dirán”, añade, “que es por el impago de dos recibos y que eso es cosa de Canaragua; pero no es la primera vez que se hace” pues, asegura, “en menos de un mes, a la organización de UB se le ha cortado el agua en dos ocasiones”.
Apunta que “la primera vez nos personamos en Canaragua y posteriormente contactamos con el concejal de Obras, Gonzalo Pascual”. Le manifestaron que “no teníamos inconveniente en llegar a una compensación por los recibos adeudados, puesto que el Ayuntamiento tiene una deuda contraída con UB de más de 30.000 euros”. Después de mantener “esta primera conversación”, subraya, “se nos restableció el agua.
La segunda vez fue el 8 de octubre, “después de la publicación de unos escritos en los medios de comunicación por parte de UB ¿Casualidad?”
“Nos hemos puesto nuevamente en contacto con el Concejal de Obras y Aguas del Ayuntamiento”, expone, “que nos manifestó que no sabía nada y que ya nos diría algo”.
Al no recibir respuesta, añade, “hemos presentado una instancia en el Ayuntamiento para que quedara constancia de nuestra solicitud, donde de nuevo pedimos la compensación económica para subsanar el pago de dichos recibos. No les exigimos que se nos abone la totalidad de la deuda que tiene contraída con UB, pero al menos tenían que ser consientes que la organización tienen unos gastos básicos que asumir. Y esto debería ser entendido por el actual grupo de Gobierno, puesto que la gran mayoría de ellos cobra mensualmente del Ayuntamiento”.
Esta situación en la que “nos encontramos es totalmente opuesta a otras de 'amiguismo' con las que nos topamos, por ejemplo: ”el actual concesionario del kiosco de la Urbanización Taburiente, transcurridos más de 10 meses de ésta, no ha ejecutado las obras del paseo que estaban en las bases de la concesión, con los consabidos inconvenientes que produce para los vecinos de la zona; no es entendible que se elabore una ordenanza de ocupación de mesas y sillas en espacios públicos donde se prohíbe la colocación de muebles, mostradores o enseres de hostelería y, al mismo tiempo, la ordenanza se contradice en uno de sus puntos, ya que el Ayuntamiento puede permitir otra cosa totalmente distinta. ¿Con esto se está intentando que en la avenida de la Constitución, una plaza pública, se permita la colocación de un mostrador y un grifo de cerveza? Y lo que es más grave, ¿qué la toma de corriente de dicho grifo sea pública? Preguntado esto en un pleno se nos contesta que esto era asuntos personales. ¿Entiende ustedes que las plazas y la luz pública es un tema personal?.
Asimismo prosigue, “en diversas ocasiones la alcaldesa ha manifestado que regularizaría la situación de la cerrajería del almacén de los Cejas. Transcurridos casi dos años y medio de legislatura no lo ha hecho; sin embrago, ha presumido de regularizar otras. Esta, al día de hoy no paga alquiler, no paga agua, no paga basura, no paga luz, etcétera. Sin embargo sigue con su actividad y, he aquí la paradoja, por el impago de dos recibos de agua, te la cortan sin previo aviso. Seguramente que si fuéramos familia de la mandataria de nuestro municipio no nos hubiese pasado, viendo el ejemplo anterior”. Este comunicado, alega, “ni mucho menos es demagogo, ni marrullero, ni lo elaboramos porque tenemos problemas personales y los mezclamos con los públicos”. “Juzguen ustedes”, concluye, “quienes se benefician de lo personal, quien se beneficia de lo público y quiénes no”.