¿Debe evitarse la aspiración de la /-s/ final cuando la palabra siguiente comienza por vocal?

0

La aspiración de /-s/ implosiva, tanto en posición final (calles, libros, comes) como en interior de palabra (pesca, mosca, lasca) es un rasgo que suele señalarse como caracterizador del amplio conjunto de hablas que engloba el concepto de español atlántico. El estudio de la variación relativa a este fenómeno en diversos lugares de América y España (sobre todo en Canarias) ha permitido conocer algunos patrones de uso, ya que el contexto lingüístico influye en la presencia o ausencia del sonido sibilante. Su posición ante consonante favorece la realización aspirada, mientras que el hecho de que la palabra siguiente comience por vocal ayuda al mantenimiento de la /-s/ final como sibilante. Pero hay que tener en cuenta el carácter tónico o átono de la vocal siguiente, puesto que es un rasgo que influye en algunas comunidades hispánicas en la conservación o debilitamiento de la sibilante; así, en el español de Canarias es normal pronunciar la /-s/ final del artículo como sibilante en los aros o las horas, pero como aspirada en los alumnos o las arenas.

La situación que hemos descrito es propia de la norma culta canaria, como han demostrado los estudios realizados sobre ese nivel sociocultural; no hay, por consiguiente, una actitud negativa hacia la aspiración de /-s/ ante vocal átona. Ahora bien, en los últimos años se está produciendo un cambio en nuestro ámbito dialectal: la aspiración se ha extendido también a los casos en que a la /-s/ le sigue una vocal tónica, por lo que puede escucharse la aspiración de la /-s/ en las olas, mis árboles, aunque mucho menos cuando la palabra siguiente tiene, después de la vocal inicial, un sonido aspirado (los ojos, las hojas). Se trata de un fenómeno que ha ganado mucho terreno entre los hablantes de las generaciones más jóvenes; por tanto, más que hablar de una diferencia de nivel sociocultural, habría que ver este fenómeno como un cambio explicable por el factor generacional.

Palabras nuestras

 tablero

1. m. GC. Porción de terreno llano en una pendiente. De todas las tierras de la herencia, la que más valía era el tablero.

2. m. Tf. Superficie rocosa plana de mayores dimensiones que la tablada.

3. m. Fv. y Go. Llanura en terreno erial.

4. mOr. Fondo marino llano. Fondeamos sobre un tablero y por eso el rozón no agarraba.

tablada

1. f. Fv. y GC. Terreno plano en lo alto de una montaña o risco pequeño; meseta. Le decían las tabladas porque era un terreno llano entre muchas montañas.

2. f. Tf. Superficie rocosa plana.

Información sobre la localización de voces y acepciones

Fv: Fuerteventura

GC: Gran Canaria

Go: La Gomera

Hi: El Hierro

LP: La Palma

Lz: Lanzarote

Tf: Tenerife

Occ: Islas occidentales (Tenerife, La Gomera, La Palma y El Hierro)

Or: Islas orientales (Lanzarote, Fuerteventura y Gran Canaria)