El grupo de Gobierno de la Villa y Puerto de Tazacorte (PSOE-PP) considera “una desfachatez y desvergüenza que desde Unión Begañeta (UB) se reclame la devolución de subvenciones solicitadas durante su mandato y devueltas por no haber sido justificadas, siendo ellos los responsables directos de la gestión municipal”.
La alcaldesa, la socialista Carmen Acosta, se muestra “indignada por la continua huida hacia delante de la autodenominada oposición responsable de UB”. Considera que “es de irresponsables hacer unas afirmaciones de este calibre sabiendo que, quien tiene la responsabilidad de estas devoluciones son los mismos que las denuncian en un ejercicio de cinismo e hipocresía y, por lo tanto, son los que tendrían que explicar al pueblo por qué los dineros de todos y todas se han administrado de esta manera”.
Asimismo, Acosta afirma que “ojalá las cantidades a devolver por esta administración local no fuesen las que son” y aclara que “la cantidad mencionada en esta nota de prensa lamentablemente se queda corta con la cantidad real de devoluciones e intereses que hemos heredado de la pésima gestión económica de UB, dilapidando e hipotecando la economía municipal por muchos años”.
La Concejalía de Hacienda asegura que se han tenido que devolver o están pendientes de hacerlo un total de cuatro convenios por un importe total de 17.512,69 euros. El motivo de la devolución, afirma, es que “se pagaban sueldos inferiores a lo subvencionado, como es el caso del último convenio donde se subvencionaba la cantidad de 1.400 euros por trabajador y se pagaba una media salarial de 1.201,39 euros”.
El único convenio solicitado por el actual grupo de Gobierno, aclara Carmen Acosta, “ha sido el Proyecto Tazacorte Municipio Intergeneracional cultural y sin barreras. 2011-2012, del que hemos devuelto únicamente la cantidad de 1.667,36 euros correspondiente a la baja de una trabajadora durante prácticamente todo el curso”.
Acosta teme que “lo peor puede estar por venir, ya que existe una notificación de que está en curso un procedimiento administrativo de devolución de una subvención concedida en el 2007, una subvención por un importe de 129.600 euros para un proyecto donde UB se comprometía a contratar a 21 personas y solo contrató a 3, siendo ésta una condición indispensable para la aprobación de dicho proyecto”. Añade que “a este motivo de reclamo de devolución, se le suman otros errores administrativos tales como facturas presentadas no admitidas como válidas, presentación de fotocopias de cheque en vez de facturas originales, facturas a nombre de particulares en vez de a nombre de la administración local y además, la no presentación de documento alguno que justificase el material adquirido para la realización de ese proyecto, así como los anexos correspondientes a la justificación económica del mismo”.
Por otro lado, la alcaldesa de Tazacorte señala que “tampoco se justifican las nóminas y los seguros sociales por no presentarse debidamente, al igual que no se presentan los seguros de responsabilidad civil o seguros de desempleados, la póliza de seguros contratada ni se acredita el pago de apuntes contables ni de transferencias bancarias”.
En definitiva, señala Acosta, “gracias a las diferentes gestiones para intentar salvar este disparate, se ha logrado justificar una gran cantidad pero aún así se podrían reclamar a este ayuntamiento 38.955,46 euros más, además de los costes por no contratar a esas 21 personas comprometidas, sumando un total de cantidad a devolver de 84.696,52 euros”.
En cuanto a los intereses a los que se refiere UB, Carmen Acosta informa que “solo se han pagado 1.799,63 euros por fraccionar el pago de los seguros sociales, fórmula totalmente legal usada para poder tener liquidez y hacer frente a las nóminas de los trabajadores”.
Además, añade que “es una cantidad irrisoria en relación a los intereses que reclaman Lopesan (72.000 euros) y Gesplan (40.000 euros), importe este último incluido en la deuda de más de 240.000 euros que se viene abonando mensualmente a razón de 3.000 euros, más dos pagos al año de 10.000 euros, no olvidando los otros intereses devengados por requerimiento judiciales firmes por impagos”.
Carmen Acosta también quiere “poner en conocimiento que se han salvado otras subvenciones que tampoco estaban debidamente justificadas, logrando una prórroga para hacer frente a otra que queda aún pendiente de justificar, todo ello fruto de la nefasta gestión de Unión Bagañeta”.