En estos tiempos convulsos, inciertos y errantes, el trabajo continuo del feminismo no ha parado, ni parará. Somos y estamos. Nos queremos vivas y nos queremos libres y claro que sí, Canarias vuelve a unirse para mostrar y visibilizar un grito reivindicativo, pacífico e igualitario, bajo el lema conjunto Feminismos canarios sin fronteras.
El 8M no es solo una fecha, son multitud de proyectos, ideas y luchas. Las feministas queremos expresar, decir, comunicar y mostrar que estamos trabajando y lo hacemos por un bien común, por un bien que no afecte solo a ese 51% de la población, sino que se extienda sin descanso, por todas las culturas, por todas las tierras, por todas las raíces, por todos los cielos, por la igualdad al 100% de las personas.
Puede parecer que en el siglo XXI todo está dicho ya, o que somos conscientes de todos los problemas que nos afectan directamente, o de todos los problemas que tenemos alrededor, y no es así. Aún nos quedan caminos de luchas para parar las desigualdades, de las personas que están cerca, las que están muy cerca, pero también de las de lejos, por ello estamos trabajando. Para dar voz a las personas que no pueden tenerlas o que tienen miedo o son coaccionadas para que no la tengan.
Trabajamos para salir a la calle y celebrar el 8M, que es un derecho y no uno adquirido sin lucha sino un derecho ganado, con mucho sufrimiento, y con mucha valentía y con un esfuerzo continuo en el tiempo que nos viene legado también como un patrimonio que hay que defender.
Defender la igualdad es una fiesta, agridulce, sí, ya que recordamos a todas las mujeres que no están, a las que han sido asesinadas, quienes no saldrán, pero que nos dan fuerzas e ilusión para seguir. El feminismo lucha para que todas las personas seamos legales e iguales.
Desde la Plataforma Feminista Palmera hacemos saber que estamos trabajando por la igualdad, que estaremos en la calle el 8M y que queremos que la ciudadanía se pueda sumar a una celebración responsable, tranquila, segura y abierta.
Sí, la igualdad es un bien común que hay que proteger, siempre.
Nos vemos el 8M.