Pudo disfrutar poco de su jubilación. El perro Cool, un pastor belga malinois que durante doce años prestó servicio a la sociedad canaria en la Unidad Canina de Rescate de Ayuda en Emergencia Anaga (AEA) de La Palma, ha dejado este mundo. El animal, que se había retirado el pasado mes de abril, falleció el pasado domingo con 13 años. Los miembros de AEA lamentan la pérdida de este can, considerado una estrella dentro de la unidad por su excelente formación. Estaba homologado en grado C en grandes áreas, en grado B en escombros y en grado A en la IRO (prueba internacional de rescate).
Francisco Hernández, responsable de la Unidad Canina de Rescate de AEA, recordaba a La Palma Ahora el pasado mes de abril que “el perro quiere seguir trabajando pero las fuerzas le fallan”. Era muy activo y se despidió de su trabajo con la búsqueda de una mujer que desapareció en la Caldera de Bandama, en Gran Canaria, y que finalmente fue hallada muerta.
Desde que nació, y hasta la jubilación, estuvo en AEA, y recorrió media España realizando cursos de formación. Tiene en su historial la localización de un joven ahorcado en La Cumbre y de otro envenenado en Barlovento.
Francisco Hernández asegura que “Cool me ha enseñado mucho a mí y siempre lo traté como a un miembro de la familia”. El pasado domingo tuvo que despedirse de él antes de lo previsto. No oculta que el trago fue duro.