La Fundación CajaCanarias impulsa la acción social de base de Cáritas

La Palma Ahora

Santa Cruz de La Palma —

La Fundación CajaCanarias ha procedido “a impulsar un convenio” con Cáritas diocesana destinado a paliar “las situaciones de desigualdad, exclusión y emergencia social que atenaza a importantes capas de la ciudadanía” en La Palma y Tenerife, señala en un comunicado. Al efecto, añade, ambas entidades han suscrito el correspondiente acuerdo. La iniciativa, añade, se lleva a cabo “en el marco” del “compromiso permanente” de la citada Fundación para mitigar el mencionado problema.

En la nota se indica que “la Fundación CajaCanarias y Cáritas persiguen, como objetivos generales a través de esta acción social permanente, dar respuestas a las necesidades básicas de las familias que acceden al servicio de atención social de base, mejorar la calidad de vida a nivel personal, familiar y social de personas desfavorecidas en las islas de Tenerife y La Palma, y crear una conciencia social que permita a la sociedad participar activamente en la resolución de los problemas de su entorno más cercano”.

Añade que “el epicentro de la alianza entre ambas instituciones se encuentra en la denominada ”acción social de base, por medio de la que, de manera permanente, Cáritas impulsa la mayoría de sus esfuerzos a través de una intervención organizada, de cara a modificar el medio social y mejorar las condiciones de vida que resulten negativas para las personas, grupos y comunidad“. En ese sentido, Cáritas entiende como ”acción social aquella que se realiza a través de un conjunto de servicios destinados a los grupos sociales para resolver sus necesidades, y como instrumento para crear los recursos necesarios para una mejor calidad de vida. Esto implica por tanto, la participación de la persona, colectivos-grupos y de la comunidad, para resolver sus diferentes y principales problemas“.

Explica que “para avanzar eficazmente en la detección y búsqueda de soluciones adaptadas a cada problemática, la intervención de Cáritas se realiza en tres niveles: a nivel individual, ofreciendo información, orientación y asesoramiento, así como realizando con la persona usuaria el proceso de desarrollo individual y colectivo; a nivel grupal, mediante el desarrollo de talleres grupales para el fomento de habilidades sociales, búsqueda de empleo, economía doméstica, etc; y en la comunidad, por medio del impulso y facilitación de la creación de redes en la comunidad, así como avanzando en el asociacionismo, apoyando la denuncia y la sensibilización sobre problemas en la comunidad y fomentando la aparición de iniciativas locales para la mejora de la sociedad”. Estos tres ámbitos de intervención “se apoyan y son retroalimentados entre sí por un constante y permanente análisis local que va a ir permitiendo a Cáritas realizar una radiografía del estado de la comunidad antes y durante la intervención social”.

Detalla que “el objetivo fundamental no es otro que ahondar en el proceso de inserción gradual en el medio de aquellos ciudadanos en situación de riesgo o exclusión social, a través del cual el sujeto recupera las herramientas necesarias para ser un miembro participante de la sociedad en la que se desenvuelve”.

Cáritas cuenta, en la actualidad, con 89 puntos de acogida, desde donde se realiza la acción social de base. El hecho de contar con un número tan importante de centros de trabajo, distribuidos por todos los barrios, facilita el trabajo con las familias en su entorno más próximo. Para dicha atención, además, existen 10 técnicos y más de 300 personas voluntarias en primera línea de trabajo y otras 600 en segunda línea de apoyo, que trabajan en los diferentes proyectos (casas y centros específicos para personas sin hogar, jóvenes en situación de riesgo, infancia, etc.).