Pastores

Siempre se habla de la dureza del trabajo del campo, de las dificultades que entraña para el ganadero adaptarse a todo tipo de normativas europeas, de la falta de relevo generacional, etc. Pero por el contrario también se puede hablar de excelentes profesionales de la cría y conservación de especies autóctonas, del orgullo de producir alimentos de calidad, de ser verdaderos expertos y conocedores del medio… me refiero a los pastores.

En realidad, los pastores del siglo XXI son pastores de la biodiversidad. Ya lo eran antes, siempre lo han sido, pero no lo poníamos en valor, no lo conocíamos. Su sabio manejo del rebaño por pastos y montes favorece el desarrollo de muchas especies vegetales. En muchas regiones el pastoreo es utilizado como herramienta para la creación y el mantenimiento de inmejorables cortafuegos naturales, manteniendo el paisaje agroforestal. El estiércol fertiliza el suelo y le da vida. Y todo ello produciendo una carne, leche y quesos de excelente calidad.

“Un sector que contribuye a la conservación de nuestro medio ambiente y a generar actividad económica en el ámbito rural”. Así valoran las autoridades europeas la labor de pastoreo tradicional de ovejas y cabras.

Una de las principales razones por las que este manejo tradicional tiene una contribución directa a la mejor conservación del medio ambiente hay que buscarla en la alimentación de la cabaña. Las cabras adultas ingieren entre 1,5 y 2,5 kg diarios de materia vegetal seca (entre 350 y 1.500 g de hojas y brotes de matorrales), mientas que las ovejas adultas en pastoreo pueden consumir de 2 a 3 kg de materia seca diaria (matorral y especies leñosas). Al consumir los recursos vegetales durante su trasiego, los rebaños eliminan biomasa que, si no se convertiría en un manto de combustible. El pastoreo tradicional permite el aprovechamiento de los recursos naturales, favoreciendo su conservación.

“El oficio mantiene la aureola de ser un empleo complicado”, pero los propios pastores, agrupados en la Federación Estatal de Pastores (FEP), rechazan esta etiqueta y recuerdan que “no deja de ser una actividad remunerada, como muchas otras, a la que se añade, además, un importante papel en la conservación del medio ambiente, la ganadería extensiva permite la protección de los bosques y de los montes, ayuda a evitar la despoblación de las zonas rurales y es también más ecológica y sostenible que la intensiva”.

La Federación Estatal de Pastores (FEP) es una agrupación de organizaciones cuyo objetivo general es defender, promocionar y dar apoyo a los sistemas y derechos de los ganaderos/as extensivos, ya sean estantes o trashumantes, para fortalecer la viabilidad presente y futura de su actividad ganadera.

La desaparición de la ganadería extensiva ha disparado el riesgo de incendios, hasta el punto de que en muchas zonas forestales se está estudiando reintroducir los ganados para el mantenimiento de las áreas cortafuegos, pero no hay pastores.

Escuelas de Pastores: Picos de Europa, Artzazin Eskola, Catalunya, Extremadura, Canarias (Gran Canaria) ...

La Escuela de Pastores de Picos de Europa es una iniciativa formativa en un doble sentido: acercar los nuevos adelantos a los pastores en activo, y acercar a los pastores al resto de la sociedad, y en concreto, a aquellas personas que se interesen en dedicarse al pastoreo. Apuestan por la formación dentro de una estrategia de revalorización de la figura del pastor y tratar de crear la posibilidad del relevo generacional.

Artzain Eskola se dedica a la defensa de la oveja latxa y a la formación de pastores, con el objetivo de profesionalizar el pastoreo y garantizar su permanencia en Euskadi. Más de cien pastores y pastoras formados en esta escuela han logrado insertarse en el entramado socioeconómico del sector ovino desde la puesta en marcha del centro en 1997, una cifra que valoran muy positivamente sus responsables.

La Escuela de Pastores de Cataluña, señala en su página web, que es un proyecto formativo que propone un nuevo modelo de agricultura. A través de la incorporación de nuevas generaciones, se muestra que el sector primario, por sí mismo, es un sector viable económicamente. Con una apuesta por una producción a pequeña escala de base familiar y / o cooperativa; sostenible con el entorno y con el sector.

La Escuela de Pastores de Extremadura es un espacio de formación específica para profesionales del sector ovino, desde el ganadero al restaurador, incluyendo los diversos sectores de transformación de sus productos (queso, lana, carne de cordero) siendo también un espacio para nuevas iniciativas que puedan surgir alrededor del mismo. Además de un lugar para la difusión y conocimiento del sector ovino que muestre a la sociedad la importancia que tiene, el ovino en régimen extensivo, en una gran parte del medio rural de nuestro país, desde un punto de vista social, económico y medio ambiental.

En Canarias, la primera Escuela de Ganadería y Pastoreo comenzó su andadura el pasado septiembre en Gran Canaria, con el objetivo de actuar en dos de las debilidades del sector primario de la isla: la escasez de mano de obra especializada y la falta de relevo generacional.

En la isla de La Palma muchos añoran a los pastores de cumbre, verdaderos conocedores de los montes y cumbres palmeras, mantenedores de nuestra raza autóctona de cabras, la cabra palmera, trasmisores de la rica cultura asociada al pastoreo, tanto en patrimonio inmaterial (conocimiento, costumbres, toponimia, etc.) como material (cabra palmera, pastos, y sobre todo los quesos). Verdaderos héroes y cuidadores de una cultura y tradición heredada directamente de los benahoaritas.

Alejandro Escuder Gómez. Veterinario.