El subdirector de Protección Civil y Emergencias del Gobierno de Canarias, Néstor Padrón, intervino en la tarde de este jueves en la jornada formativa sobre protocolos de emergencia organizada por el Cabildo de La Palma para exponer las principales líneas del decreto de seguridad en playas y zonas de baño aprobado el pasado mes de agosto. Padrón aclaró que, pese a ser la seguridad en el litoral una competencia de los ayuntamientos, el Gobierno de Canarias ha dispuesto una línea de financiación a través del Fondo de Financiación Municipal para sufragar el coste de las medidas que los consistorios deben implementar, se informa en nota de prensa.
“El Gobierno aumentó este Fondo en 30 millones en la Ley de Presupuestos de 2018 y consolidó este incremento que se mantendrá en las siguientes anualidades. Si bien el Fondo de Financiación es de libre disposición, este incremento de 30 millones debe ir destinado obligatoriamente a seis competencias municipales que son de interés del Gobierno, entre ellos, la implementación de las medidas de seguridad en playas y zonas de baño que exige el decreto”, explicó.
Padrón explicó que el nuevo decreto gira en torno a la prevención, la anticipación, la planificación y la intervención como ejes para lograr una mejora sustancial en materia de seguridad pública.
“Nuestro objetivo es fortalecer la prevención como estrategia fundamental en la seguridad del litoral y mejorar la atención y la respuesta coordinada a las diferentes situaciones derivadas de las emergencias tanto ordinarias como de Protección Civil”, señaló.
Una de las novedades más relevantes de la nueva norma reguladora es la creación del Catálogo General de Playas y otras Zonas de Baño Marítimas de Canarias como instrumento al servicio de las diferentes administraciones públicas y de la ciudadanía en general. “Permitirá conocer los diferentes tipos de playas y otras zonas de baño marítimas conforme a su clasificación según el grado de riesgo, sus características físicas o el nivel de protección por temporadas, entre otros aspectos”.
El decreto clasifica a las playas como libres, peligrosas o de uso prohibido. En las playas peligrosas o libres se determinará el grado de protección para cada una de las temporadas de afluencia, que podrá ser bajo, moderado o alto. Dicho grado de protección será el resultado de combinar el criterio de la afluencia de personas con el riesgo intrínseco de la playa, según los parámetros establecidos en el propio decreto. Si es moderado o alto, la playa deberá contar con el correspondiente Plan de Seguridad y Salvamento elaborado por el ayuntamiento.
En este sentido, Néstor Padrón recordó que la Consejería de Política Territorial puso en marcha a comienzos del presente año, a través de la Dirección General de Seguridad y Emergencias, la plataforma web www.infoplayascanarias.es en la que se da asistencia a los ayuntamientos tanto para la incorporación de sus playas y zonas de baño al catálogo como para la redacción de los planes de seguridad. “Ya se han registrado la mayoría de los municipios costeros de Canarias”, informó.
El subdirector de Protección Civil y Emergencias quiso hacer también hincapié en la figura fundamental del socorrista o guardavidas dentro de esta nueva estrategia de prevención y seguridad en el litoral que marca el decreto y la necesaria profesionalización de este sector, en línea con las conclusiones de los expertos que participaron en el reciente II Congreso de Seguridad y Prevención en el Litoral celebrado en Tenerife.