El Venerable Maestro de la Logia Abora-87, Luis Monterrey, ha asegurado a La Palma Ahora que la decisión del obispo de la Diócesis Nivariense, el palmero Bernardo Álvarez, de suspender la misa en memoria de los masones fallecidos que estaba programada para el próximo viernes, 2 de septiembre, a las 20.00 horas, en la Iglesia del Salvador de Santa Cruz de La Palma, es “un atropello más del Obispado de Tenerife a la masonería”.
“Es una decisión que ha tomado el obispo basándose, creo, en una carta del señor Ratzinger, según le ha transmitido este domingo al Venerable Maestro Electo Jerónimo Saavedra”, ha explicado. Otras fuentes han asegurado que la prohibición de la función religiosa se debe a que “se hizo pública en la prensa”.
Luis Monterrey ha afirmado que “la decisión del señor obispo es muy respetable, pero a título particular le puedo decir que no la comparto porque los masones estamos dispuestos permanentemente a servir a esta sociedad, y hacer una misa en memoria de todas esas personas que han muerto es igual que si otras organizan un funeral en homenaje al general Franco”. “Quiero dejar muy claro que esta es una decisión del Obispo de Tenerife, no de la Iglesia Católica”, subrayó. Recordó que “en la Orden Masónica casi todos los que están son católicos, practicantes muchos de ellos, por lo que me parece una falta de respeto total y absoluta a los miembros de la masonería que se le haga eso”, dijo, y concluyó: “Es un atropello más del Obispado de Tenerife a los masones”.
El citado Venerable Maestro avanzó que en las próximas horas la Gran Logia de España hará público un comunicado en el que da su versión sobre esta decisión del Obispado de Tenerife.
La misa en homenaje a los masones estaba programada con motivo de los actos del retorno de la Logia Abora-87 a su sede histórica de Santa Cruz de La Palma.