El presidente del Cabildo de La Palma, Mariano Hernández Zapata, ha lanzado este lunes un “mensaje de tranquilidad y normalidad” tras la subida de la isla a nivel amarillo por riesgo de erupción volcánica tras detectarse desde este pasado fin de semana más de 400 sismos en la zona de 'Cumbre Vieja', algunos por encima de magnitud 3.
En una declaración difundida por la corporación insular, ha apuntado que “la situación es tranquila” aunque durante la pasada noche “se hayan sentido ligeros movimientos” sísmicos en la zona centro y sur de la isla, especialmente.
Así, ha apuntado que los técnicos del Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca) afirman que “se debe seguir a la expectativa” pero “elevando el semáforo” por la alta incidencia de los últimos días y la evolución que ha habido en los últimos meses.
El Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan) vincula la actividad sísmica en la isla a un proceso de intrusión magmática en el interior de la corteza y que afecta a los municipios de Mazo, El Paso, Fuencaliente y Los Llanos de Aridane.
A diferencia de 'enjambres' anteriores, cuando los sismos se localizaban a profundidades superiores a 20 y 30 kilómetros, este nuevo episodio fluctúa entre los 9 y los 12 kilómetros aproximadamente.
El Cabildo ya mantiene reuniones técnicas con los cuatro municipios más afectados para coordinar posibles acciones.