Las llegadas de migrantes a las costas de Canarias en la última quincena de julio han aumentado hasta alcanzar los 1.677 migrantes, en comparación con la primera mitad del mes, cuando 536 personas alcanzaron las costas del archipiélago.
En todo el mes de julio han arribado a las islas 2.213 personas, una cifra similar a la de junio (2.140) y superior a las de mayo, abril y marzo, cuando se contabilizó una media de 1.706, según el balance quincenal sobre inmigración irregular que publica el Ministerio del Interior.
Aun así, las cifras están lejos de las registradas a comienzos de año, cuando solo entre enero y febrero llegaron a las costas canarias 11.932 personas tras superar la que es considerada como una de las rutas migratorias más peligrosas del mundo.
En lo que va de año, son 21.470 las personas que han arribado a Canarias en 328 embarcaciones precarias como pateras o cayucos, más del doble que en el mismo periodo de 2023 (8.508), una diferencia motivada, sobre todo, por el gran repunte de principios de año.
Las llegadas a Canarias suponen el grueso de todas las entradas irregulares al país por cualquier vía, que ya han alcanzado las 29.031, de las cuales 27.640 han sido por el mar.
El número de personas que han accedido por vía marítima a la península o a las Islas Baleares, en cambio, han disminuido respecto a 2023: 6.151 en estos primeros siete meses del año frente a los 6.962 del año anterior.
También han descendido las llegadas por mar a las ciudades autónomas de 2023 a 2024: en Ceuta han bajado de 33 a 13 y en Melilla, de 100 a 6 las personas que han llegado por esta vía desde el 1 de enero al 31 de julio.
Sí han aumentado respecto a 2023 las llegadas a Ceuta por vía terrestre, que incluyen a los migrantes que acceden a nado: si a estas alturas del año pasado habían arribado así 510 personas, este 2024 lo han hecho 1.354, 134 en los últimos quince días.
A Melilla, en cambio, han llegado menos personas por este medio en los primeros siete meses de 2024: 37 en lugar de los 61 de 2023.