La Policía ha detenido a tres hombres como presuntos patrones del cayuco que arribó al sur de El Hierro, la más occidental de las islas de Canarias, el domingo pasado y en el que murieron 26 personas debido a las terribles condiciones de la travesía. Todas ellas, menos un menor de edad, fueron arrojadas por la borda, según el relato de los supervivientes recabado por el cuerpo de seguridad
En el cayuco arribado a La Restinga viajaban 48 personas de origen subsahariano, de las que cinco fueron hospitalizadas, entre ellas, dos menores de edad.
Los migrantes que llegaron a tierra, entre los que había mujeres y niños, contaron que habían sufrido unas condiciones muy duras en la travesía y uno de ellos, aparentemente menor de edad, había fallecido.
Los agentes de la Policía Nacional se desplazaron al puerto para llevar a cabo las diligencias de investigación y asistenciales necesarias.
A través de las manifestaciones de los migrantes supieron que la embarcación había partido desde Nuackchot, en Mauritania, de madrugada y con al menos 75 personas a bordo. En cuestión de días se agotó el suministro de agua y sólo disponían de galletas para comer, lo que hizo que alguno de los hospitalizados, para saciar su sed, bebiera agua salada.
Las duras condiciones impuestas por los patrones durante la travesía que, presuntamente, llegaron a atar y golpear a un hombre, así como las circunstancias intrínsecas al viaje, podrían haber conducido a la muerte de más de 25 personas, señala la Policía Nacional.
Sus cuerpos, según las manifestaciones recogidas por los agentes, fueron arrojados por la borda, cuatro de ellos poco antes de su llegada a la isla de El Hierro.
Los investigadores procedieron a la detención de tres de los migrantes, supuestos patrones de la patera, como presuntos autores de los delitos de homicidio y contra los derechos de los ciudadanos extranjeros. Dos de ellos, una vez puestos a disposición judicial, ingresaron en prisión preventiva.
Otro presunto patrón detenido en Tenerife
La Policía Nacional recuerda que ese mismo día corrieron distinta suerte otros 12 migrantes que llegaron al puerto tinerfeño de Los Cristianos, entre los que también había mujeres y niños y que presentaban un buen estado de salud a su llegada.
Los policías nacionales, tras su investigación, procedieron a la detención de uno de ellos al considerarlo el patrón de la embarcación y presunto autor de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.
Esta persona, tras ser puesta a disposición judicial, ingresó en prisión preventiva.
Las actuaciones fueron realizadas por policías nacionales de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de la Comisaría Provincial de Policía Nacional de Santa Cruz de Tenerife.