El Partido Popular, que hasta este viernes no ha mostrado una postura clara y unánime sobre la reforma de la Ley de Extranjería para conseguir que se reparta entre las comunidades a los menores migrantes no acompañados, sostiene ahora que la apoyará si esta es “objetiva”, “razonable” y cuenta con el concurso de todas las comunidades autónomas para poder “resolver” el problema de inmigración, “no para engordarlo”.
Así lo ha asegurado el portavoz nacional del partido, Borja Sémper, en una entrevista en la Cadena Ser recogida por EFE en la que se ha mostrado muy crítico con la política migratoria y de acogimiento del Gobierno, que ve inexistente. Cabe recordar que la reforma se refiere a la acogida a los menores migrantes no acompañados, cuya tutela es hasta ahora competencia de las comunidades autónomas, no del Gobierno central.
Sémper ha censurado que, ante un problema de saturación por la “masiva” llegada de inmigrantes a Canarias, el Ejecutivo responda exclusivamente distribuyéndolos “de forma aleatoria por toda España”, sin contar con las comunidades autónomas de acogida. Sin embargo, la petición del reparto no ha partido del Gobierno central, sino del de Canarias, donde gobierna precisamente el PP junto a Coalición Canaria. De hecho, los populares en las Islas han respaldado el texto de la modificación de la Ley junto al resto de grupos en el Parlamento de Canarias (salvo Vox), aunque el presidente del PP de Canarias, Manuel Domínguez, se desmarcó de acudir a Madrid a la ronda de reuniones con las autonomías y grupos del Congreso para explicar la reforma y conseguir los apoyos necesarios para tramitarla, principalmente, el de su propio partido.
Sémper ha admitido que le preocupa esta manera de proceder porque “estamos hablando de seres humanos y, singularmente de menores, (...), no de paquetes que distribuir por España como el que distribuye paquetería express”, ha apostillado. El texto, sin embargo, sí recoge que los menores se deriven a otras regiones del país en función de criterios acordados en 2022 con las comunidades en una Conferencia Sectorial, como el PIB o la población.
Tras incidir en que hay un problema muy serio en Canarias porque no puede acoger a ese volumen de inmigrantes, ha abogado por buscar una solución “solidaria”, mientras que se ha preguntado qué está haciendo el Gobierno, por ejemplo en Mauritania, para atajar a las mafias. La acogida solidaria, sin embargo, ha demostrado hasta ahora no ser efectiva: aún no se ha ejecutado el traslado de 400 menores desde Canarias y Ceuta que el Gobierno de España pactó con las comunidades autónomas hace dos años. Tampoco las derivaciones de 374 jóvenes acordados en 2023. Estos traslados iban a negociarse el pasado martes en una Conferencia Sectorial, pero las comunidades decidieron aplazarla poco tiempo antes de que se celebrara tras conocer que se había acordado con el Gobierno canario (CC-PP) para el reparto obligatorio.
Sémper ha opinado que una manera de frenar el creciente populismo que se sustenta en las políticas migratorias es “responder bien ante la inmigración”, siendo conscientes de que hablamos de seres humanos, ha dicho el portavoz del partido del que algunos de sus líderes han hecho declaraciones públicas vinculando inmigración con delincuencia, o incluso asegurando que estas personas transmiten enfermedades.
“Si no lo hacemos bien tendremos problemas y crecerá el populismo y el enfado de los ciudadanos”, ha advertido, al tiempo que ha remarcado que no ve que este Gobierno esté haciendo política por “ningún lado”, pese a que el ministro de Política Territorial está acompañando al presidente de Canarias, Fernando Clavijo, en la ronda de contactos y se ha alcanzado este acuerdo entre ambas administraciones.