24 muertos a bordo y tres supervivientes en muy malas condiciones. Fue el dantesco escenario que se encontraron los rescatadores que llegaron hasta el cayuco que, a la deriva, se adentraba en el Atlántico dejando atrás el archipiélago canario sin que nadie conociera su paradero. Estaban a unos 490 kilómetros al sur de El Hierro y fue un avión que realizaba unas maniobras quien los avistó y dio la alarma.
La embarcación que zarpó desde Gran Canaria para llegar hasta la embarcación tardó casi un día en navegar los casi 600 kilómetros de distancia entre el puerto y el cayuco. Dada su situación y el estado de los tres supervivientes, se decidió que el rescate de estas personas se realizase por vía aérea. Un helicóptero del SAR del Ejército del Aire despegó inmediatamente para llegar hasta ellos.
Estas son las angustiosas imágenes que grabaron:
Los miembros de los equipos de rescate que llegaron hasta ellos han relatado cómo fueron esos primeros momentos. “Es la misión más dura que he tenido”, confiesa uno de los pilotos del helicóptero del Servicio de Búsqueda y Rescate (SAR), el comandante Ignacio Crespo. Los dos rescatadores que se descolgaron al cayuco, el sargento primero Fernando Rodríguez y el cabo primero Juan Carlos Serrano, recuerdan la experiencia como algo “terrible”, porque tuvieron que recoger en brazos a los supervivientes, dos hombres y una mujer deshidratados, incapaces siguiera de levantarse, a los que había que transportar por el cayuco sorteando travesaños y cuerpos.
Los tres rescatados, dos hombres y una mujer, se recuperan en hospitales de la isla y están estables.
Esta tragedia en el mar, que deja 24 muertos y varios desaparecidos, ya que se cree que la patera habría zarpado con el menos 50 personas a bordo, es ya la mayor en la llamada ruta canaria en lo que va de año.