El ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, rechaza la vía del decreto para sacar adelante la reforma de la Ley de Extranjería (cuya toma en consideración fracasó este martes en el Congreso) porque, en su opinión, sería “la crónica de una muerte anunciada”.
Así lo ha señalado en una entrevista con la Agencia EFE en la que ha repasado el “complicado” horizonte que se abre tras el intento frustrado el martes de empezar a tramitar la reforma del artículo 35 de la ley para establecer una acogida vinculante entre todas las comunidades autónomas y aliviar así los recursos de zonas tensionadas como Canarias, Ceuta y Melilla.
Torres niega poder dar una respuesta ante esta incertidumbre “a unas horas” de que haya decaído la que, para él, sigue siendo la única solución viable: modificar la norma a través de una proposición de ley.
La iniciativa rechazada consiste en establecer un mecanismo de acogida vinculante de los menores migrantes no acompañados, que significaría la derivación a otras regiones, en un año, de unos 2.500 jóvenes que actualmente acoge Canarias, pero que no puede atender correctamente.
Pero sí tiene claro que no es viable la opción de aprobarla a través de un real decreto, como sigue exigiendo el Gobierno de Canarias, presidido por Fernando Clavijo (CC), ya que, explica, este habría que convalidarlo igualmente 30 días después en el Congreso y, según lo vivido estas últimas semanas, le parece “imposible” porque no ve “voluntad de negociación” en el PP.
Además, esta vía, en su opinión, daría “inseguridad jurídica” a los niños que en ese mes se hubieran desplazado si después el decreto no es convalidado, que quedarían “en un limbo jurídico”.
Ocho meses trabajando con Canarias y cuatro documentos con el PP
El Congreso ha rechazado la toma en consideración de esta reforma con el no de Vox, que ya lo había anunciado como inamovible; de Junts, que había pedido condiciones inasumibles para el Gobierno, y el PP, con el que hubo intercambio de documentos hasta el último momento, pero con el que finalmente no hubo acuerdo.
Al analizar lo ocurrido hasta unas horas antes de la votación, el ministro tiene claro que el Gobierno ha hecho “todo el esfuerzo” posible, que empezó con ocho meses de trabajo “leal” con el Gobierno de Canarias, alejado de “polémicas”.
“En ocasiones, con frases que debían ser respondidas por el PP, pero no lo hice porque puse por delante conseguir sacar esta proposición de ley”, asegura.
Meses que acabaron con el intercambio de hasta cuatro documentos con el portavoz del PP en el Congreso, Miguel Tellado, y la aceptación de media decena de las propuestas que habían planteado los populares, como convocar una Conferencia de Presidentes: “A cada propuesta que hacíamos nosotros, nos llegaba una con más exigencias”, explica el ministro.
Por ello, no ve espacio para la autocrítica, ya que su labor “no ha sido fácil”, y da por cumplido el compromiso firmado con Coalición Canaria para la investidura de Pedro Sánchez, que pasaba por impulsar una reforma de estas características.
Lamenta que el PP haya “dado la espalda” a comunidades en las que gobierna y que más necesitan una solución -Canarias, Ceuta y Melilla- y negado a todos la posibilidad de “empezar a hablar” sobre la propuesta, que era lo que se votaba el martes.
Y, en este sentido, pone de ejemplo a otros partidos, como Podemos, EH Bildu, ERC o PNV, que no estaban de acuerdo con la totalidad del texto pero votaron sí para poder incluir sus aportaciones en una futura tramitación parlamentaria.
Al ver el resultado de la votación y constatar que no se había conseguido llegar a un acuerdo en un asunto tan sensible como este, Torres reconoce que sintió “profunda tristeza” porque, para él, “no era esperable”, pero lo tiene claro: “Los responsables son los que impiden el trámite parlamentario”.
Lo más “penoso” es saber que ahora hay en Canarias, Ceuta y Melilla una “desazón importante” entre las organizaciones que trabajan con los jóvenes tutelados, porque “no pueden más”, y entre los que defienden los derechos de los niños y niñas, quienes recuerda, son las verdaderas víctimas del fracaso de ayer.
A Clavijo: “Quienes han votado 'no' son sus socios, eso no lo he escuchado”
Una de las reacciones tras el fracaso de la tramitación de la reforma en el Congreso ha sido la del presidente canario, Fernando Clavijo, que ha criticado el “empecinamiento” del PSOE en esta materia y exigido, una vez más, que se apruebe la iniciativa por decreto ley mientras se sigue negociando su convalidación con el PP.
Ante estas críticas, Torres asegura haber trabajado con lealtad con el presidente canario y “remado hacia el mismo lugar” los últimos meses, pero no ve aceptable “que se ataque a quienes han votado que sí”: “Quienes han votado 'no' son sus socios, quienes han , eso no lo he escuchado”. Por ello, el ministro ha dicho estar “profundamente decepcionado” con Fernando Clavijo, que dirigió sus críticas este miércoles al PSOE, sin reproche alguno al PP, su socio de Gobierno, que votó que no a la reforma en el Congreso.
“No se puede edulcorar o suavizar a quien ha sido la pieza clave para que no se transmite este proyecto de ley”, sentencia.