PALMA DE MALLORCA, 28 (EUROPA PRESS)
La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Palma reanudará este lunes, a partir de las 10.00 horas, el juicio contra la expresidenta del Parlament y del Consell Maria Antònia Munar, el exvicepresidente insular Miquel Nadal y otros ocho acusados, enmarcado en una de las piezas del caso Maquillaje, con el interrogatorio en calidad de testigos de quienes fueron los chóferes de ambos exaltos cargos de UM, del excontable del partido Álvaro Llompart y del periodista Antoni Martorell.
La comparecencia de todos ellos será el plato fuerte de la jornada, puesto que, entre las numerosas testificales previstas, la comparecencia de los dos conductores de los vehículos oficiales de los que hacían uso Munar y Nadal permitirá profundizar en los hechos que, según el antiguo 'delfín' político de la exdirigente 'uemita', sucedieron en uno de los coches: la presunta entrega de 300.000 euros en metálico por parte de Munar a Nadal para la compra de la mitad de las acciones de la productora Vídeo U.
Y es que, tal y como puso de manifiesto en fase de instrucción y ha ratificado en el juicio el exvicepresidente del Consell, la expresidenta insular le dio un sobre con el dinero mientras volvían de un acto en coche oficial por la autopista de Inca, con el objetivo de adquirir mediante dos testaferros las participaciones de Vídeo U y disponer así de un medio “favorable” a la extinta formación. Según declaró, iban en la parte trasera del vehículo cuando Munar le dijo: “aquí lo tienes”, mientras le extendía el sobre.
Unos hechos que, sin embargo, niega de forma tajante la histórica dirigente de UM, quien recalcó en este sentido que “nunca jamás se sacó dinero de UM para ello”. “Nunca nadie me ha hablado en absoluto de la adquisición de las acciones”, aseveró Munar quien, a preguntas del fiscal anticorrupción Juan Carrau, incidió en que “nunca en UM ha habido dinero negro” con el que podría haberse pagado los 300.000 euros para adquirir la productora, que, dijo, era de “Miquel Oliver [fundador de Vídeo U] y del PSIB, no de UM”.
Mientras tanto, también está citado Llompart, quien se encuentra imputado en el marco de otra causa de presunta corrupción, el caso Voltor, que investiga la concesión presuntamente irregular de subvenciones desde el Inestur en favor de afines a UM, y en la que se ha prestado a colaborar con los investigadores de cara a lograr futuras atenuantes.
Por su parte, Martorell, exmilitante de UM, fue, bajo la presidencia de Munar, director insular de Comunicación durante la legislatura 2003-2007, año en el que fue elegido por el Parlament como director general de la radiotelevisión autonómica balear IB3. Precisamente, Martorell fue involucrado por parte de varios imputados en el caso Maquillaje, quienes afirmaron haber cobrado de empresas vinculadas a UM como recompensa por los trabajos y favores electorales que efectuaron para el partido nacionalista en los comicios de 2007.
CONTRATADOS POR HABER COLABORADO PARA UM
Precisamente, entre estos encausados se encontraba la exempleada del gabinete de Comunicación del Consell Débora Lorente, quien también está citada este lunes como testigo. Tal y como afirmó, en 2004 se entrevistó con la entonces secretaria de este departamento, Margarita Sotomayor -también acusada-, en cuyo despacho firmó el contrato para desempeñar la función que llevaría a cabo hasta 2007. En presencia de Oliver le dijeron que debían contratarla a través de Ambbit Digital -vinculada a Vídeo U- pese a que su trabajo iba a desarrollarlo en el Consell con Sotomayor.
Según manifestó al respecto, nadie le comentó nada de que trabajaba para una empresa privada, sino que Sotomayor se limitó a decirle que “tenía que ser así” a tenor de una determinada cláusula. Ya en 2007, Oliver y Martorell se reunieron con ella en un despacho y le dijeron que continuara trabajando para UM pese a seguir cobrando de Ambbit, tal y como sucedió en las elecciones de ese año.
Otros de los testigos citados para esta jornada son Petra Verdú, Juan Arrom y Gregoria Morata. En el caso de Verdú, excolaboradora de UM y exempleada de Ambbit Digital así como de diversos organismos públicos, apuntó a la expresidenta de Emaya y exregidora de Medio Ambiente, Cristina Cerdó, como la persona que medió para su contratación en varias de estas empresas, pese a que en realidad no realizó trabajo alguno en ellas sino que únicamente trabajaba para el partido.
Mientras tanto, Morata, exsecretaria de UM Palma, aseguró en esta misma línea, también en el marco del caso Maquillaje, haber trabajado para varias empresas sin recordar “quién me pagaba ni qué nombre figuraba en las nóminas, ya que sólo miraba el importe”, si bien relató que comenzó a vincularse a UM como colaboradora a través de Sotomayor.