Equo ha realizado este jueves una protesta ante el Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente para reclamar “responsabilidades políticas” por la oleada de incendios forestales que azota España y exigir un plan de acción contra las causas de los siniestros.
Los miembros de la formación ecosocial han formado con pancartas que tenían la frase '#stopincendios' con el objetivo de reclamar responsabilidades políticas y denunciar los recortes que se han producido en la lucha contra los incendios.
Equo recuerda en un comunicado que a lo largo de este verano se han quemado ya más de 150.000 hectáreas en España, y en el caso de Canarias, el fuego ha afectado a Tenerife, La Palma y La Gomera. Desde la formación ecosocial se insiste que, aunque los datos del Ministerio no están actualizados, la superficie quemada en España es ya “la mayor en la última década”.
Equo denuncia también los recortes presupuestarios que se han producido en materia de lucha contra los incendios, tanto en el Ministerio como en las Comunidades Autónomas que, en el caso de los Parques Nacionales, han llegado al 20%, y en esta ocasión, el de Garajonay, por ejemplo, ha resultado muy afectado.
Asimismo, la formación ecosocial advierte de que las temperaturas extremas de este verano también han tenido una incidencia clave. “Compartimos la visión de muchos científicos de que el cambio climático está confirmando ya uno de los pronósticos más temidos, veranos más cálidos y con condiciones más extremas”, señala el co-portavoz de Equo, Juan López de Uralde.
Uralde reclama la creación de un plan contra incendios que vaya a la raíz del problema actuando durante todo el año para “prevenir” el fuego y que incluya “medidas” contra los efectos del cambio climático.
Recorte de presupuestos
“Los incendios son responsabilidad de los que los provocan pero no cabe duda de que también hay responsabilidades políticas, ya que se han tomado decisiones que van al recorte de los presupuestos medioambientales”, explica.
Equo reclama, por ello, la creación de un plan de acción a largo plazo contra los incendios forestales que no se base solo en las medidas de lucha contra el fuego, sino fundamentalmente en la prevención de incendios, con acciones concretas en el mundo rural, en especial en las zonas forestales.