Espera un dictamen de expertos para aprobar el voto de los vascos exiliados por la violencia
BARCELONA, 18 (EUROPA PRESS)
El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha defendido que los encuentros entre terroristas arrepentidos de ETA y víctimas “valen la pena” si reparan heridas de la víctima y llevan el preso a la reinserción.
“Si este encuentro se produce y de ese encuentro surgiera algo que ayudara a reparar las heridas de las víctimas y que ayudara al asesino a seguir el camino de la reinserción, ¿no valdría la pena el esfuerzo?”, se ha preguntado.
En el Barcelona Tribuna, foro promovido por la Sociedad Económica Barcelonesa de Amigos del País, la Asociación Española de Directivos (AED) y La Vanguardia, ha respondido así al periodista Luis del Olmo, que había estado amenazado por ETA, que le ha preguntado por los “romances” entre víctimas y etarras tras las últimas reuniones mantenidas.
Jorge Fernández ha certificado que no va a haber romances y ha puesto de ejemplo a una persona “tan poco sospechosa” como Consuelo Ordóñez, hermana del concejal del PP asesinado por ETA Gregorio Ordóñez, que ha pedido reunirse con uno de sus verdugos, Valentín Lasarte, que ya ha manifestado su conformidad.
El ministro del Interior ha explicado que estas reuniones las inició el anterior Ejecutivo central por la denominada 'vía Nanclares' --para presos arrepentidos--, y que ellos han seguido “en lo esencial pero con matices”.
Ha indicado que las penas de prisión en general deben ir siempre encaminadas a la rehabilitación social y, si bien existían muchos programas en esta línea para todo tipo de presos, no ocurría así con los terroristas, y por ello se han creado “en base al cumplimiento de la ley”.
Se trata de la reinserción individual mientras están cumpliendo la pena para que el preso “sea mejor persona al salir que cuando entró”, y en esta lógica se insertan las reuniones, siempre que la víctima lo solicite.
DERECHO A VOTO
Paralelamente, el ministro ha explicado que están trabajando para que los vascos en el exilio expulsados por la violencia de ETA, porque la amenaza del terrorismo “les hacía imposible vivir en libertad”, puedan votar en los comicios en el País Vasco.
Para Jorge Fernández, en una sociedad en que ETA ha abandonado la lucha armada, una de las “asignaturas pendientes” son los derechos de estos ciudadanos, entre ellos el derecho fundamental a votar, ha indicado.
Para hacerlo con todas las garantías, el Centro de Estudios Políticos y Constitucionales ha creado un grupo de expertos para que estudien su viabilidad jurídica, y si ellos determinan que es posible, desde el Gobierno lo impulsarán: “Es de justicia y razonable” en el contexto de la reconciliación que una medida así se ponga en marcha, ha dicho.
Sin embargo, el ministro ha indicado que “no es razonable” que personas que no han vivido nunca en el País Vasco, nietos y bisnietos de personas originarias vascas, puedan votar, mientras que personas que se han ido por la amenaza terrorista no.