Pide que “todos” sepan reconocer el dolor que “todos hemos padecido”
BILBAO, 26 (EUROPA PRESS)
El diputado general de Guipúzcoa, Martín Garitano, ha afirmado que “buscar la humillación del contrario no es una forma de resolver las cosas de forma razonable”.
En una entrevista a Onda Vasca, recogida por Europa Press, Garitano ha asegurado, en relación al tema de las víctimas, que cada vez que habla de este tema, se desencadena “algún tipo de polémica y muchas veces artificial y ficticia”.
A su juicio, es importante que, a la hora de hacer frente a un futuro de “normalidad política y de paz definitiva, todos sepamos reconocer el dolor que todos hemos padecido”.
“Y en orden a eso, cada uno tiene que ser consciente de qué es lo que puede hacer y hasta dónde puede llegar. Buscar la humillación del contrario no es una forma de resolver las cosas de forma razonable”, ha agregado.
CAMBIO DE GOBIERNO
Garitano, que ha indicado que le gustaría visitar a Arnaldo Otegi en la cárcel, ha afirmado, ante el cambio en el Gobierno central, que
cuando accedieron al Ejecutivo de la Diputación pidieron 100 días de gracia al resto de los partidos y, por tanto, le van a conceder esos mismos 100 días a Mariano Rajoy.
En todo caso, el diputado general de Guipúzcoa ha señalado que le pediría “audacia, vista de Estado, de estadista, tener la talla de un estadista que tiene la posibilidad de resolver un problema secular y hacerlo con decisión”.
En este sentido, ha afirmado que no debería “dejarse condicionar por esa caverna mediática que en el Estado español tanto parece que pinta, pero que al final es posible que alguien se dé cuenta de que el león no es tan fiero como lo pintan”.
En relación a los presos de ETA y al hecho de que las encuestas señalen que la sociedad española cree que no hay que hacer ningún movimiento en política penitenciaria, ha asegurado que los 700 presos son “vascos y entonces la sociedad vasca lo vive como algo propio”, pero, a su juicio, “la opinión pública española tendrá que ser consciente y mejor pronto que tarde de que un país de tres millones de habitantes, como el nuestro, con un colectivo de 700 presos políticos, no es un país en situación normalizada”.
“Si queremos y buscamos la normalidad, la normalización política que asiente una paz definitiva, ese problema se tiene que resolver per se”, ha añadido.
Por otra parte, ha indicado que la decisión sobre si Sortu será legal o no supondrá un “cambio radical”, ya que “un país que mantiene fuerzas políticas en la ilegalidad, pues es un país no democrático”.
“Eso es una obviedad. Es importante que Sortu sea legalizado, que Sortu pueda desarrollar la actividad política en régimen de libertad y sin el miedo a la persecución judicial y policial, y que en definitiva aquí cada uno se pueda medir y pesar para que cada uno sepa a quién representa”, ha afirmado.