Un guardia civil resultó herido en la madrugada de este domingo como consecuencia de un tiroteo con presuntos terroristas frente a la casa cuartel de la localidad navarra de Leitza, informaron a Europa Press fuentes de la lucha antiterrorista.
El suceso se produjo alrededor de las 03:30 horas de este domingo cuando el agente se percató de movimientos fuera de la casa cuartel y al ir a identificar a los sospechosos se produjo el tiroteo.
El miembro de la Benemérita evoluciona favorablemente tras ser intervenido en el Hospital de Navarra, en Pamplona, informó en rueda de prensa el equipo médico del centro sanitario. El agente sufría una herida de bala en el brazo. Su vida no corre peligro.
El suceso podría no tratarse de un tiroteo provocado por miembros de la banda terrorista ETA, según informaron fuentes del Ministerio del Interior, que precisaron que en la investigación de los hechos que realiza el Instituto Armado, la hipótesis del atentado pierde peso.
El Departamento que dirige el ministro Alfredo Pérez Rubalcaba precisó que la investigación de la Guardia Civil baraja diversas hipótesis entre las cuales, el hecho de que se trata de un atentado terrorista pierde peso en estos momentos, si bien no precisaron más detalles sobre las razones del suceso.
En un primer momento se informó que los presuntos terroristas pretendían colocar un lanzagranadas en una ladera cercana al la casa cuartel de esta localidad desde donde poder atentar contra el edificio, informaron a Europa Press fuentes de la lucha antiterrorista.
Estas fuentes recordaron que la banda terrorista ETA ya empleó este procedimiento en Navarra el 12 de octubre de 2002, cuando dos granadas impactaron contra la fachada de la casa cuartel de la Guardia Civil en la localidad navarra de Urdax (Navarra), sin que ninguna de las personas que ocupaban el inmueble resultaran heridas. Los impactos provocaron la rotura de cristales en el 60% de la superficie del acuartelamiento.
En aquella ocasión, en un monte cercano al edificio se encontraron cuatro tubos lanzagranadas con temporizador. Dos granadas impactaron contra el cuartel, otra cayó en un río y una cuarta se quedó en el tubo.
Este atentado se produjo sólo dos semanas y media después de que ETA asesinara en Leitza a un agente de la Guardia Civil al explotar una bomba colocada junto a una pancarta. Según precisaron las fuentes consultadas, la casa cuartel de Leitza se encuentra en una disposición muy similar a la del complejo de Udax. Asimismo, incidieron en la cercanía de Leitza con Guipúzcoa así como su fácil conexión con Francia.
Planes de Martitegi
Estas mismas fuentes añadieron que, tras la detención el pasado mes de abril del último jefe militar de la banda, Jurden Martitegi, las fuerzas de seguridad le incautaron una serie de documentos en los que se recomendaba este tipo de atentados contra edificios con lanzagranadas.