La coordinadora federal de Izquierda Socialista-PSOE reclama un “rearme ético e ideológico” en el seno del partido para combatir la “profunda crisis política, ideológica y organizativa” que atraviesa la formación.
En una reunión que tuvo lugar el pasado 3 de enero en la sede federal del PSOE, con la presencia de los coordinadores territoriales llegados desde toda España, esta corriente de opinión interna ha reiterado la necesidad de celebrar un Congreso Federal “abierto, transparente, participativo y democrático” y de elegir un nuevo secretario general por el procedimiento “del voto universal, directo y a dos vueltas de los militantes” en unas primarias con participación de militantes y simpatizantes.
En relación a las candidaturas a la secretaría general del PSOE, Izquierda Socialista apoyará a la candidata o candidato “que más confianza y compromiso adopte en la defensa e impulso de los ideales del socialismo democrático de izquierdas que venimos propugnando desde hace tres décadas”.
Izquierda Socialista ha recalcado que los malos resultados alcanzados en las elecciones municipales, autonómicas y legislativas en 2011 son la expresión de la crisis del partido “y no su causa”. “Una crisis cuyas raíces hay que buscarlas en la progresiva pérdida de identidad socialista del partido y en la permanente insuficiencia de su democracia interna. Hoy es legitimo preguntarse si las direcciones políticas del PSOE, de 1979 a 2011, han ayudado a fortalecer la capacidad de alternativa social que fundamenta los orígenes y las luchas de los socialistas, o al contrario han conducido a una cierta desnaturalización ideológica del socialismo y de sus articulaciones organizativas”, cuestionan.
La corriente de opinión interna del PSOE pide una reconstrucción de la “propuesta socialista de izquierdas” que haga prevalecer “la coherencia” entre las práctiacas políticas y los valores y principios que defienden. Así, apuestan por una “verdadera progresividad fiscal y una fiscalidad verde impulso de una UE democrática, social y federalista”.
Izquierda Socialista también ha expresado su “voluntad firme en la lucha por ampliar las libertades, avanzar en la democracia participativa y consolidar los principios de justicia e igualdad en nuestra sociedad”. Una voluntad que exige una acción política que “no esté subordinada a la tiranía de los poderes económicos, los mercados, sino a la creación de una banca pública potente y empresas públicas en los sectores estratégicos”.
“Propugnamos un programa político capaz de coordinar a los socialistas con la izquierda plural, con los sindicatos de clase y con los movimientos sociales progresistas entorno a un programa de izquierdas que haga frente a la peligrosa deriva neoliberal que la derecha española, europea e internacional está fortaleciendo”, concluyen.