MADRID, 22 (EUROPA PRESS)
La presidenta de la Fundación Víctimas del Terrorismo, Maite Pagazaurtundúa, ha pedido, en una entrevista concedida a Europa Press, que se impida a Bildu estar en las próximas elecciones del 20 de noviembre porque son un “agente patógeno” para la democracia que puede extender la “mancha del daño” que está causando a los “grandes principios” de la Constitución.
Asegura que la “ración” de “sarcasmos” que el mundo de ETA lanza cada día son una “tortura” y una “humillación” para las víctimas y demuestra que la “operación de márketing” que hicieron Usabiaga, Goiricelaya e Iruin por los despachos influyentes fue un “engaño” y una “artimaña”.
En su opinión, el mundo de ETA ha conseguido crear una “tercera burbuja” de paz, que la banda puede pinchar si no logra lo que busca, igual que hizo en 1998 y 2005-2006.
Cree que con esta táctica, ahora “más sutil”, buscan crear un modelo de fin del terrorismo basado en la “impunidad” sin “justicia; equiparar las víctimas a los victimarios y ”sacar beneficio“ de la estrategia del terror logrando sus objetivos políticos. Maite Pagazaurtundúa considera que la actitud que ha mostrado la coalición Bildu desde las elecciones del pasado 22 de mayo ha puesto de manifiesto que la ”operación de márketing“ que llevaron a cabo Rafael Díez Usabiaga, Ione Goiricelaya e Iñigo Iruin por ”despachos y lugares influyentes“ era una ”engaño“. Lo hicieron, dijo, para ”camelar“ a la opinión pública e influir, directa o indirectamente, a ”quieres tenían que tomar finalmente la decisión“.
“ARGUCIA” POR DESPACHOS INFLUYENTES
Se trató, dice, de una “gigantesca operación”, de un “magnífico ejercicio de ilusionismo colectivo”, una “argucia” para “conseguir la legalización de Bildu”. Sin embargo, afirma, una vez logrado el objetivo, el “trío más famoso en esa operación” se ha “callado” y “ha empezado a actuar Bildu con su verdadera cara”.
Para la presidenta de la Fundación de Víctimas, el resultado es que ETA ha conseguido construir “por tercera vez” una “burbuja de paz”, después de haberlo hecho en Lizarra en 1998 y “con el Gobierno socialista en 2005-2006”. Y lo han conseguido, señala, “jugando con los deseos inmediatos de paz y tranquilidad de los ciudadanos” y con la “suspensión temporal de los atentados”.
En su opinión, el mundo de ETA ha “mutado” la táctica para buscar colar sus objetivos finales, conseguir la victoria política, pero aprovechándose de matar, de parar de matar, o de amenazar con volver a matar. Esta vez, afirma, la operación resulta “más sutil y más edulcorada” y han conseguido que el mensaje de la “equidistancia” esté calando “más que otras veces”. Sin embargo, Pagaza alerta de que esta “burbuja” está construida sobre “arenas movedizas” para el sistema democrático y de derecho, sobre “pilotes” poco sólidos y poco fundamentados ya que lo han hecho sin condenar la violencia y sin pedir la disolución de ETA. En este sentido, aclara que, si la izquierda abertzale fuera sincera “sentirían vergüenza y pedirían perdón por lo que han ayudado a hacer”.
“RACIÓN DIARIA DE COMENTARIOS SARCÁSTICOS CONTRA LAS VÍCTIMAS”
Pero, en lugar de esto, señala, se despachan día tras día con una “ración” de “comentarios sarcásticos” que son una “tortura moral” y una “humillación” para las víctimas del terrorismo.
Esta “tercera burbuja” que ha logrado crear el mundo de ETA, pretende, según la presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, atacar los fundamentos del Estado de Derecho, vaciando el sentido de “los valores superiores que están en el artículo uno de la Constitución: libertad, justicia, igualdad y pluralismo político”.
“El modelo que nos ofrecen no es ni de Justicia en el final de ETA, ni de verdad, ni de respeto”, exclama Maite Pagaza, quien precisa que lo que están buscando es “impunidad” en lugar de justicia; demuestran un “afán por la equidistancia en el reparto de responsabilidades, equiparando víctimas con victimarios” y tratan de “sacar beneficio de la estrategia del terror de todas estas décadas tras debilitar el pluralismo político en el País Vasco y Navarra ” intentando obtener sus objetivos políticos.
Sin embargo, advierte, “cada vez que esas burbujas se ponen en marcha, si no consiguen lo que quieren, impunidad y sus aspiraciones políticas, pueden pinchar la burbuja una vez más”. “ETA siempre puede pinchar la burbuja”, aclara y recuerda que ya la pincharon tras 1998 y tras 2006 y que ahora, igual que hicieron entonces, vuelven a decir descaradamente que “el Estado es el que tiene que moverse”.
DAR LA VUELTA A LA SITUACIÓN
Tras realizar este análisis de la situación, Maite Pagaza pide a la “comunidad política”, a los “grandes agentes políticos” que no se enreden en el juego tramposo de la vieja-nueva Batasuna, que “estén unidos”, realicen un “análisis compartido” y pongan en práctica una “estrategia común” porque, precisa, “hace falta darle la vuelta a la situación” y evitar caer en el “juego de tiempos y administración de la burbuja” que está dirigiendo ahora el mundo de ETA.
Maite Pagaza no quiere apuntar cuáles son las “acciones concretas” que se deberían llevar a cabo, pero sí deja claro que Bildu no merece estar en el Parlamento nacional porque utilizarían su presencia para “dañar el tejido social e institucional español”. En este sentido, advierte de que si Sortu es legalizado o si logran presentarse bajo las siglas de Bildu “extenderán la mancha de daño” para buscar vaciar los “grandes principios democráticos de la Constitución”.
Según la presidenta de la Fundación de Víctimas, los miembros de la izquierda abertzale son unos “agentes patógenos” desde el punto de vista democrático y, en este momento hay una “sucesión fraudulenta” de Batasuna sobre la que se han despejado las dudas con la “practica” de los últimos meses.
En cualquier caso, está convencida de que los Estados “pueden defenderse” de estos “agentes patógenos” ya que la ley tiene “mecanismos” para ello. “Lo que no podemos hacer es dejar que avance una mancha de corrupción de nuestros principios legales del respeto a la ley y del respeto a la justicia”, aseveró.
DUDAS SOBRE LA SABIDURÍA Y TRANSPARENCIA DE LOS GRANDES PARTIDOS
Por ello, insistió en que lo “más eficaz” es que los grandes partidos trabajen “en común” en las grandes cuestiones de Estado, aunque manifestó sus dudas sobre si tienen la “suficiente sabiduría y ganas de ser transparentes”. “Muchos días escuchamos grandes palabras sobre derrotar a ETA y edificar el futuro sobre la memoria de las víctimas, pero por otra parte, en las bambalinas han pasado cosas que no conocemos”, lamentó en referencia a los “paseos” de la “vieja Batasuna” por los despachos para conseguir la legalización y asoman y conviven discursos “muy ambiguos” que “enlazan más bien con la búsqueda, disimulada, de un fin de ETA ”sin vencedores, ni vencidos, radicalmente incompatible con el anterior.
Pagaza también lamentó que, del documento elaborado por las víctimas para un fin sin impunidad de ETA se hayan cumplido precisamente algunos de sus “temores”, como por ejemplo que se legalizara al mundo de Batasuna sin que hubiera una condena contra ETA.