El Senado buscará dinero para aprobar el uso de las lenguas autonómicas

MADRID, 4 (EUROPA PRESS)

El Senado aprobará este mes la reforma de su Reglamento para ampliar el uso de las lenguas autonómicas y que se puedan escuchar en los Plenos, aunque sólo en el debate de las mociones y no en las sesiones de control al Gobierno. La iniciativa entrará en vigor en 2011, para dar tiempo a reorganizar el Presupuesto de la Cámara y que este paso no cueste un euro más en plena crisis económica y con las cuentas públicas recortadas.

La Diputación Permanente del Senado deberá autorizar que en el mes de julio se trabaje en comisión, tal y como han solicitado los defensores de la reforma, 34 senadores de todos los grupos parlamentarios salvo del PSOE y del PP. En concreto, en la Comisión de Reglamento, que podría reunirse en la semana del 12 al 16 de julio.

Si se mantiene el consenso que existe entre todos los grupos salvo el PP, de esa comisión saldrá un dictamen que podría ser aprobado la semana siguiente, en el Pleno previsto para los días 20 y 21, informaron a Europa Press fuentes parlamentarias.

ENMIENDAS PRESENTADAS

Tras varios años de declaraciones de intenciones, un grupo de senadores registró una propuesta para reformar el Reglamento y que el euskera, el gallego, el catalán y el valenciano se escuchen más allá de la Comisión General de Comunidades Autónomas. Este es el único foro parlamentario en el que estas lenguas pueden ser usadas, puesto que es el único también en el que pueden participar si quieren los Gobiernos autonómicos.

Pese a que las pretensiones nacionalistas eran mucho más ambiciosas --llevar las lenguas a la vida ordinaria de la Cámara Alta, incluídos los debates con el presidente y los ministros--, han admitido la limitación socialista de las mociones para dar al menos un paso y que sea, además, en los Plenos, centro de la vida parlamentaria.

El PSOE también ha presentado una enmienda para que la medida entre en vigor el año que viene, para buscar en el Presupuesto actual de la Cámara el dinero con el que pagar a los traductores que serán necesarios. El objetivo es que no cueste ni un euro más.

El PP es el otro grupo que ha presentado enmiendas, en su caso, para vaciar de contenido una propuesta a la que se oponen totalmente. A su juicio, la Constitución deja claro que el uso de las lenguas cooficiales debe limitarse al ámbito de su comunidad autónoma y sus instituciones.

Según defiende el PP, la Cámara Alta representa a todo el pueblo español, por lo que su actuación debe realizarse “en términos que facilite la comprensión por todos los españoles”. “Y por tanto, ha de desarrollarse en castellano”, insiste, antes de advertir de que, en caso contrario, se estaría “hurtando a parte del pueblo español de la posibilidad de conocer, entender y comprender los términos en que se desarrolla el debate entre sus representantes”.

La iniciativa recibirá en el Pleno del Senado otro voto en contra, el de la representante de UPN María Caballero, miembro del Grupo Mixto, que no ha presentado.