El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, expresó este martes su “especial gratitud” al hasta hoy vicepresidente económico del Gobierno, Pedro Solbes, por su “ejemplar entrega, dedicación y tenacidad” durante su vida pública en los últimos cuarenta años.
Zapatero destacó, en la rueda de prensa para dar a conocer su nuevo Gobierno, que de Solbes todos han aprendido “lo que es la tenacidad, dedicación e inteligencia en defensa de los intereses generales”, y resaltó que ha hecho de toda su vida “una vida de entrega al servicio público de forma ejemplar”.
El jefe del Ejecutivo indicó que con Solbes la economía española ha conocido “sus momentos más brillantes” en los últimos 30 años, y destacó de él que “ha sabido combinar el rigor de una política de control del gasto y del déficit público con un compromiso con los objetivos sociales del Gobierno”.
“Lo ha hecho en los momentos de expansión y también en estos últimos de dificultades serias y reales”, subrayó Zapatero, tras reiterar su “gratitud y afecto” al ex ministro.
Decisión compartida con Solbes
Dicho esto, Zapatero quiso dejar claro que el relevo de Solbes ha sido fruto de una reflexión y decisión “compartida” por ambos desde la necesidad de un “cambio de ritmo” para acelerar y poner “toda la energía” para combatir la crisis económica.
“(Estos cambios) son siempre decisiones compartidas fruto de una reflexión, y mi experiencia desde que soy presidente del Gobierno es que la disponibilidad de los ministros es siempre la máxima, con una lealtad que quiero subrayar de todos, que es muy gratificante desde el punto de vista personal”, reiteró.
De esta forma, Pedro Solbes, un ministro caracterizado por sus suaves maneras y su tono templado de voz, deja hoy el puesto que ha ocupado durante los últimos cinco años como vicepresidente económico del Ejecutivo socialista y tras más de cuarenta años dedicados a la Administración, en el marco de la remodelación del Gobierno emprendida por Zapatero.
Solbes, que nunca ha tenido carné del PSOE, se marcha en mitad de una de las crisis económicas más graves de la historia mundial y también de España, apenas un año después de ser reelegido por Zapatero para afrontar esta situación y liderar la esperada recuperación de la economía española.
Solbes, sobrepasado y cansado
La crisis ha superado con creces los peores vaticinios y ha encontrado a Solbes sobrepasado por su alcance, cansado y sin aparente energía para afrontar una recesión de tal calado: una caída del PIB del 3% y la destrucción de 4,5 millones de empleos, lo que no parece la mejor herencia dejada por un ministro que logró en la pasada legislatura registrar el primer superávit de las cuentas públicas e igualar a Italia en renta per cápita.
Hace ahora cinco años, Zapatero le eligió para la Vicepresidencia Económica, apenas varios meses antes de que concluyera su mandato de comisario de Asuntos Económicos, y antepuso la experiencia del ex ministro a las voces que parecían dar por descontado que sería Miguel Sebastián, su principal colaborador en materia económica, el elegido para esta tarea.
Ya en aquella ocasión, Zapatero tuvo que rogar a Solbes que aceptara el cargo, que no ha estado exento de varias polémicas precisamente con Sebastián, primero desde la Oficina Económica de Moncloa y después desde el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo. No en vano hay quien atribuye a Sebastián la deducción de los 400 euros, la principal promesa electoral de Zapatero en las pasada legislatura y la medida económica más criticada.
Solbes, más valorado como gestor que por su faceta política, abandona así el cargo que ostentaba desde el año 2004 después de las sucesivas muestras de cansancio que siempre han molestado a Moncloa, pero que Zapatero achacaba a la fina ironía y al humor mediterráneo del alicantino.
“Envidio a Bermejo por ser ex ministro”, llegó a decir Solbes en una ocasión al valorar la salida del Gobierno de su colega Mariano Fernández Bermejo, tras la polémica que suscitó la cacería compartida con el juez Baltasar Garzón.
Otras inquietudes vitales
Sin embargo, esa no fue ni la primera ni la única ocasión en la que el ministro puso de manifiesto sus deseos de abandonar la Administración. “Hay veces que uno se tiene que plantear qué hacer en la vida”, dijo no hace mucho tiempo al ser preguntado por la crisis de Gobierno que lleva meses planeando sobre el Ejecutivo socialista.
Incluso, nada más ser renovado en el cargo, confesó que se arrepentía al menos cinco veces al día de haberle dado 'el sí' definitivo a Zapatero, quien acabó convenciendo a Solbes para volver a ocupar la vicepresidencia económica en la segunda legislatura, a pesar de que su intención inicial era abandonar el Gobierno tras las primeros cuatro años de mandato.
Zapatero, por su parte, ha decidido encomendar a la hasta ahora ministra de Administraciones Públicas, Elena Salgado, la tarea de lidiar con una profunda recesión económica, una histórica tasa de paro y una situación verdaderamente incierta en el panorama financiero.
Solbes, nacido en Pinoso (Alicante) en 1942, ya estuvo al frente de la cartera de Economía durante el Ejecutivo de Felipe González entre 1993 y 1996, fecha en la que fue sustituido en el cargo por Rodrigo Rato con la llegada del PP al Gobierno.
Con anterioridad a 1996, ocupó la cartera de Agricultura, Pesca y Alimentación entre 1991 y 1993, y tras su paso por ambos ministerios, fue nombrado en julio de 1999 responsable de la cartera de Asuntos Económicos y Monetarios de la Comisión Europea, presidida por el italiano Romano Prodi.
Uno de los artífices del euro
Como comisario europeo, Solbes fue uno de los artífices de la introducción del euro en enero de 2001, proceso que culminó con “éxito”, y fue uno de los principales defensores del cumplimiento del Pacto de Estabilidad y Crecimiento, ante los incumplimientos de Francia y Alemania.
Pasó también por el Ministerio de Asuntos Exteriores, donde tuvo un importante papel en las negociaciones para la preparación de la adhesión española a la Comunidad Europea y en 1985 fue nombrado secretario de Estado de Relaciones con la Comunidad Europea.
Licenciado en Derecho y en Ciencias Políticas por la Universidad Complutense de Madrid, Solbes también ocupó el puesto de subdelegado y delegado regional de Comercio en Valencia entre 1968 y 1973, y fue consejero comercial de la Misión Española ante las Comunidades Europeas entre 1973 y 1978 en Bruselas.
Asimismo, desempeñó el cargo de asesor de relaciones con las comunidades en el Gobierno de Leopoldo Calvo Sotelo desde mayo de 1978 hasta julio de 1979 y, posteriormente y hasta diciembre de 1982, fue director general de Política Comercial en el Ministerio de Economía y Comercio.
El hasta ahora ministro de Economía y Hacienda está casado con María Pilar Castro Rodríguez y tiene tres hijos. Además de licenciarse en Derecho y Ciencias Políticas, cursó estudios de Economía Europea en la Universidad Libre de Bruselas.