La recomendación de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) de recortar los salarios de alcaldes, concejales y cargos de confianza de los ayuntamientos, en sintonía con la medida adoptada por el Gobierno de España, empieza a contar con excusas y trucos de diverso calado en Canarias.
El primer caso conocido ha sido el Ayuntamiento de Mogán, gobernado por Francisco González (PP). En el pleno ordinario del último viernes, el grupo de gobierno integrado por el PP rechazó una moción del Partido Socialista para aplicar en la nómina del mes de junio los recortes salariales a cargos públicos recomendados por la FEMP.
La explicación ofrecida por Francisco González al pleno se fundamentó en que “yo soy un trabajador y hay funcionarios que cobran más que yo”. Además, mantuvo que ya en anteriores ejercicios el grupo de gobierno del PP decidió congelar la subida de salarios del alcalde y sus concejales, así como de algunos cargos de confianza.
Los concejales en la oposición no salía de su asombro. Mantienen la sospecha abierta de que el grupo de gobierno del PP no pretende seguir las recomendaciones de la FEMP, que fija en un 15% la reducción en el salario para alcaldes cuyas retribuciones se correspondan con nóminas similares de ministros o del Presidente del Gobierno. La horquilla llega hasta el 8% para nóminas municipales equivalentes a salarios de los directores generales de la Administración General del Estado.
Y justo en torno a la cifra más baja de esa horquilla se ha situado este martes la reducción de salarios en el Ayuntamiento de El Rosario, gobernado por Macario Benítez (PSOE). El gobierno socialista ha aprobado una reducción entre el 6% y el 9%, que será efectiva en la nómina de este mismo mes de junio. También decidió la congelación de sus salarios, con el apoyo de CC y PP y el voto en contra de Iniciativa por El Rosario-Verdes.
Una subida de un 30% en sueldos desde 2007
A juicio de IR-Verdes, la reducción, más allá de la insumisión abierta del caso de Mogán, tiene truco y picaresca en El Rosario. El alcalde, Macario Benítez, dejará de cobrar con esta rebaja unos 6.000 euros al año. Su sueldo quedaría en 66.200 euros anuales. Sus concejales, al reducirse un 6% sus nóminas, perderían apenas 3.000 euros anuales para seguir percibiendo 51.500 euros.
Escolástico Gil ha denunciado durante el pleno de El Rosario que “el alcalde cobra más que el alcalde de Las Palmas, tanto como el vicepresidente del Gobierno o el alcalde de La Laguna, en un municipio de 17.000 habitantes, es una inmoralidad en los tiempos que corren y nos ofrecemos a los vecinos para acabar con esta desvergüenza”.
Y a las cifras se remiten las críticas a la operación de maquillaje del PSOE de El Rosario. Desde 2007, los sueldos del grupo de gobierno han aumentado un 30%. La rebaja actual, por tanto, “no es proporcional” porque los sueldos del grupo de gobierno son hasta seis veces mayores que los del personal de servicios municipal“.
IR-Verdes propuso ya en 2009 una reducción drástica. Si el recorte hubiese sido de un 50% de sus sueldos, “supondría pasar de casi 600.000 euros del gasto anual que suman los sueldos del alcalde, cncejales y personal de confanza, a menos de 300.000 euros”, un recorte que, a juicio de IR-Verdes, “el impacto en los salarios más bajos habría sido mucho menor, pues habría que detraer meos sueldo de quienes menos cobran y proponíamos que el recorte no se aplicara a los trabajadores que tengan menos ingresos”.
Escolástico Gil, portavoz de IR-Verdes, critica que “mientras el personal de servicios, como peones, oficiales, vigilantes, limpiadoras o jardineros, sólo perciben 11.500 euros [anuales, menos de 1.000 euros mensuales] el alcalde y los concejales del PSOE cobran seis veces más, es decir, con lo que cuesta cada miembro del PSOE a los vecinos se podría contratar a seis personas al mes”.