Amparo Larrañaga y José Luis Gil llevarán la obra 'Ser o no ser' al Teatro Cuyás de Las Palmas de Gran Canaria

LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 16 (EUROPA PRESS)

La comedia regresará al Teatro Cuyás de Las Palmas de Gran Canaria de la mano de dos ases del escenario. Amparo Larrañaga y José Luis Gil son las cabezas de cartel de 'Ser o no ser', una versión teatral de la inmortal película de Ernst Lubitsch que firma Julio Salvatierra y dirige Álvaro Lavín, informó la organización en un comunicado.

Esta historia de héroes en plena invasión de Polonia por parte del ejército nazi se representará los días 21, 22 y 23 de mayo y supone la vuelta al coliseo grancanario de la alianza de las compañías Teatro Meridional y la canaria 'Una hora menos', que ya han protagonizado sonoros éxitos en los Teatros del Cabildo tales como 'La verdadera historia de los hermanos Marx' o 'Cyrano'.

De esta manera, Carlos Chamarro, Diego Martín, Mauro Muñiz de Urquiza, Alfonso Torregrosa, Santiago Nogués, Mauro Muñiz y Alfonso Montón completan el coro de intérpretes de esta sátira sobre los totalitarismos que, en palabras de su director, “gustaría al mismísimo Lubitsch”.

Por su parte, las entradas para disfrutar de esta comedia de altura ya están a la venta en las taquillas del teatro Cuyás, en la página web de Cajatique (www.cajatique.com), en el teléfono 902 405 504, o en el Centro Comercial Las Arenas, que, hasta final de temporada, colabora con los Teatros del Cabildo.

La trama de 'Ser o no ser' se basa en un relato corto del escritor polaco Melchor Lengyel que adelantaba la invasión de Polonia por parte de los ejércitos de la Alemania nazi antes de producirse. Una compañía de actores se prepara para representar 'Gestapo' en un teatro de Varsovia. La obra es una sátira ácida y descarnada sobre el régimen político que sufre el vecino país. Pero la invasión de Polonia obliga a suspender la representación y desencadena una serie de circunstancias que convertirán al cuerpo de actores en los líderes de la resistencia polaca de una manera totalmente imprevista e involuntaria.

En este sentido, el atrezzo y el vestuario de la obra son los instrumentos fundamentales para escapar disfrazados de oficiales alemanes, pero las cosas se tuercen y comienza una disparatada huída hacia adelante que convierte a los actores en verdaderos héroes nacionales. El enorme talento cómico de José Luis Gil es una de las bazas más sólidas de este montaje que respeta la estructura de la trama ideada por Lubitsch.

Asimismo, Álvaro Lavín destacó el “magnífico trabajo que ha realizado Julio Salvatierra a la hora de adaptar el texto”. “Se ha logrado ser muy fiel al espíritu de la película, pero hemos querido hacer un homenaje al cine, versioneando una película que, a su vez, es un gran homenaje al teatro”, comentó el director, quien añadió que el lenguaje cinematográfico “se usa de manera constante” y se ha utilizado “material audiovisual para generar la ilusión de que se está en el interior de una película”.

“Veremos escenarios en blanco y negro, actores que salen de la pantalla para andar entre nosotros en carne y hueso y mucha interacción con la imagen. El público se mete en la trama desde el primer momento y disfruta muchísimo con el espectáculo”, dijo.

La guinda del pastel es “un reparto que es muy difícil de reunir sobre un escenario”. “Cada actor ha hecho un verdadero homenaje a todos y cada uno de los personajes que aparecen en la película de Lubitsch, pero añadiendo una impronta personal que convierte a la función en algo único”, señaló el director de escena, quien añade que la reacción del público que no ha visto la película “es comprarla al día siguiente para verla y disfrutar de uno de los títulos imprescindibles de la historia del cine”.