Ana Oramas reconoce que no sabe nada del proyecto del macromuelle de Agaete y lo reduce a “50 malditos escarabajos”
La diputada de Coalición Canaria en el Congreso de los Diputados, Ana Oramas, reconoció este lunes que desconoce todo lo relativo a la ampliación del muelle de Agaete, que el Gobierno de Coalición Canaria ha adjudicado con una supuesta financiación europea, y reduce el rechazo suscitado a “50 malditos escarabajos”. Oramas demostró en su discurso, pronunciado ante un nutrido grupo de empresarios y profesionales de Gran Canaria en el Foro Prensa Ibérica, que ignora tanto este proyecto como el de la central hidroeléctrica de bombeo Chira-Soria, la obra de ingeniería civil para energía verde más grande que se llevará a cabo en España en los próximos años, ya que mezcló el impacto del primero con el del segundo. No contenta con esto, Oramas culpó a los diferentes grupos ecologistas, a cuyos miembros llamó “niños de papá”, que se han opuesto a las dos obras, de la salida de los “miles de jóvenes” del Archipiélago por la falta de trabajo.
La política fue la protagonista del Foro Prensa Ibérica este lunes celebrado en el Auditorio Alfredo Kraus de Las Palmas de Gran Canaria con el objetivo de hablar de Los retos de Canarias en el nuevo escenario político. Al ser cuestionada por uno de los asistentes por la ampliación del Puerto de Las Nieves, en el municipio grancanario de Agaete, la diputada admitió que no estaba al corriente del asunto y tanto fue así que confundió uno de sus efectos con el de la central hidroeléctrica Chira-Soria.
“No puede ser que 50 escarabajos valgan más que miles de puestos de trabajo”, proclamó ante varias decenas de personas. El Pimelia canariensis es un escarabajo endémico de Canarias que ha puesto en entredicho el soterramiento de la línea eléctrica de la central porque puede afectar a una de las especies que se ha localizado en esa zona del sur de la isla. Además, Oramas hizo alusión a la instalación del tren en las islas de Gran Canaria y Tenerife y dijo que no entiende que los ecologistas se opongan “cuando reducirá el número de coches en circulación”. La diputada ha avisado que “como sigamos con el no a todo, volveremos a los taparrabos”.
El miembro de la plataforma Salvar Agaete Borja Monreal cree que es “lamentable” que una persona que “vive en las instituciones” y cuyo partido lleva más de 20 años en el poder “acuse a los ecologistas de ser los causantes de la huida de los jóvenes de Canarias”. “Son ellos los que han conseguido que Canarias esté a la cola en sanidad, educación, equidad educativa y dependencia”, explica.
Además, Monreal invita a la diputada a que lea el informe coste-beneficio hecho por la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) y encargado por la Unión Temporal de Empresas (UTE) a la que se la ha adjudicado la obra que “ellos mismos ocultan”. “Ahí tendría claro que estos proyectos no generan empleos sino que los destruyen”.
La obra de ampliación del muelle de Agaete es uno de los asuntos más polémicos de los últimos dos años en Canarias. El presidente del Gobierno, Fernando Clavijo, y el consejero de Obras Públicas y Transportes, Pablo Rodríguez, han hecho oídos sordos al rechazo generado por sectores de la sociedad y diferentes administraciones debido al impacto ambiental que producirá la obra y han seguido adelante con la intención de comenzar los trabajos próximamente. Desde el Ejecutivo regional ni si quiera se ha entrado a abrir el debate, algo que recriminan los diferentes colectivos.
El proyecto del macromuelle contempla la construcción de un dique de abrigo con una primera alienación de 530 metros de longitud en talud con mando de Cubipods de 45 toneladas. Además, se construirá una segunda alineación de 400 metros de longitud de dique vertical a base de cajones de hormigón, así como la creación de dos atraques para ferris y otras obras complementarias de pavimentación, balizamiento, medios de atraque y amarre, urbanización e instalaciones. La infraestructura necesitaría 900.000 m3 de tierra sólo para comenzar con el relleno.
“Los impactos sobre la fauna y la flora son importantes, al igual que lo son las afecciones a la socio-economía del lugar y su gente”. Este uno de los principales argumentos que esgrime la plataforma Agaete Sin Macromuelle para que el Ejecutivo regional dé un paso atrás en la realización de esta obra. El colectivo insiste en que se debe tener en cuenta el impacto ambiental que producirá la ampliación del puerto en esta zona de la costa norte de Gran Canaria.
La turbidez generada con las obras es uno de los factores que más puede afectar ambientalmente a los ecosistemas del medio marino, detallan. En el medio marino hay multitud de organismos que necesitan oxígeno para respirar y luz para poder hacer la fotosíntesis. Por otra parte, la obra lleva aparejados determinados riesgos de vertido accidental de productos categorizados como nocivos y perjudiciales para el medio ambiente como combustibles y aceites.
Desde la plataforma también se recuerda que la entrada y salida de camiones para la realización de la obra supondrá un impacto terrestre que afectará a cientos de especies, así como el ruido que sufrirán todos los vecinos y vecinas del municipio. En este punto, se destaca el ruido marino que se producirá en el mar y se volverá “especialmente grave” para algunas especies. El sonido y las vibraciones tendrán un elevado impacto bajo el agua. Una vez y el muelle esté construido las consecuencias medioambientales continuarán.
El pasado 10 de noviembre la población isleña volvió a salir a la calle en señal de repulsa a la ampliación del muelle de Agaete. Las calles de la capital grancanaria se llenaron de pancartas con las que más de 10.000 personas pedían “Salvar a Agaete” de una obra “innecesaria” que “alterará” el paisaje del municipio.
A pesar de todo esto, los dirigentes de Coalición Canaria, representados en el ámbito estatal por Ana Oramas, han decidido continuar a por todas con la obra en el norte de Gran Canaria. El argumento principal, destrozado por Bruselas hace apenas unas semanas, es que si no se llevara a cabo la obra se perderían los Fondos Europeos de Desarrollo Regional (FEDER). En una respuesta parlamentaria, el pasado 20 de febrero, la Comisión Europea afirmó que “este proyecto no ha sido todavía seleccionado formalmente para la financiación con cargo al FEDER”.