El presidente del Parlamento de Canarias, Antonio Castro, dijo este viernes que el modelo de pleno que se desarrolló este jueves durante el debate sobre la petición de creación de una comisión sobre el caso Tebeto, no es el que le gusta, pero consideró que es una excepción. No obstante, afirmó que hasta ahora ha sido flexible en la aplicación del reglamento y se planteó ser más estricto para que situaciones similares no se repitan.
“Hay que acostumbrarse a que en el pleno hay muchas personas con criterios y personalidades distintas”, señaló Antonio Castro, quien opinó que los diputados tienen en ocasiones comportamientos que no son correctos pero que tampoco son irrespetuosos.
Antonio Castro se manifestó así tras ser cuestionado en rueda de prensa sobre lo sucedido en la sesión plenaria de este jueves en la que debatía la creación de una comisión de investigación sobre el caso Tebeto y en la que los diputados intercambiaron durante dos horas y media términos como “Testaferro”, “maestros de la mentira”, “Alí Babá y los cuarenta ladrones”, “cocineros de pasteles putrefactos”, “incompetentes”, “manipulador” o “de dudosa calaña”.
Antonio Castro, que al término de la sesión consideró que el pleno no había sido nada ejemplarizante y que lo ocurrido no se volvería a repetir, dulcificó este viernes sus manifestaciones y señaló que el “modelo” de pleno “no es el de ayer”, pero agregó que al final se acantan las decisiones.
El presidente se manifestó así durante una rueda de prensa en la que dio a conocer los acuerdos adoptados por la Junta de Portavoces, de la que dijo que había transcurrido con mucha cordialidad y en la que no se abordaron los hechos acontecidos en el pleno.
Castro, que no se ha planteado en ningún momento dimitir, indicó que para el buen funcionamiento de los plenos es necesario el correcto comportamiento de todos, y se mostró preocupado por el hecho de que se utilice la condición de parlamentario para sacar beneficio de cuestiones personales o actuar contra otros.
El presidente del Parlamento indicó que en las sesiones plenarias realiza una acción pedagógica en sus formas para intentar que los diputados reflexionen sobre su comportamiento. Además, señaló que él siempre se intenta poner en la posición del otro, pero recalcó que las reglas del juego hay que cumplirlas.