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Arde la cumbre con la esperanza en el tiempo

Los técnicos que trabajan en la extinción del incendio forestal de Gran Canaria, que comenzó al mediodía de este jueves en las cumbres y que obligó al desalojo de unas 60 personas, confían en que el cambio meteorológico previsto para la madrugada facilite las labores de extinción.

Fuentes del Gobierno de Canarias, que asumió sobre las 20:00 horas las competencias en la dirección de las labores del extinción, han informado a Efe de que los trabajos que se han realizado en varios de los focos ha dado resultados positivos pero preocupa los de Aríñez, Las Lagunetas y la Degollada de Becerra.

El perímetro del incendio es de unas 200 hectáreas aunque hay afectadas unas 70 en una zona en la que predomina una vegetación en la parte alta compuesta por retama de cumbre, matorral bajo y castaño y pinos en la parte baja.

Respecto a las personas desalojadas, el Gobierno ha informado de que aunque el ayuntamiento de San Mateo ha dispuesto el polideportivo del municipio para albergarlos, la mayoría de los evacuados pasaran la noche en casa de familiares.

También ha informado del corte de varios tramos de las carreteras que unen la rotonda de Bandama con Tejeda; Moya con Guía y Arucas con Teror.

Desde el inicio del fuego sobre las 12:00 horas en los altos de San Mateo ha trabajado un dispositivo terrestre muy amplio así como tres helicópteros, al que se unirá un Kamov que la administración central tiene destinado en Canarias para la campaña de verano.

El Gobierno ha indicado que ya se encuentra trabajando en la zona efectivos de la Unidad Militar de Emergencias así como una brigada forestal procedente del Cabildo de Tenerife.