La obra del paseo peatonal que conecta los núcleos de Arquineguín y Patalavaca, iniciada en julio de 2017, se ha finalizado con tres meses de retraso, y no ha supuesto la mejora que todos deseaban en Mogán.
Las obras para acondicionar y reforzar la plataforma anexa a la carretera GC-500, a lo largo de los 733 metros, tuvieron un coste de 615.250 euros, financiados en su mayoría por el Gobierno de España, concretamente por la secretaría de Estado de Turismo, mientras que el Ayuntamiento de Mogán aportó 115.250 euros de sus fondos municipales. Sin embargo, los resultados finales, han generado una gran indignación entre los vecinos de ambas localidades.
Por una lado, y como ya anunció Nueva Canarias, el pavimento que debía ser sustituido por otro ha sido cubierto con asfalto urbano, que puede ser muy útil en las ciudades centro europeas pero, el clima de Mogán lo hace inviable por las temperaturas que se alcanzan en los meses de verano. Además, el color con el que ha quedado el paseo es completamente negro lo que no sólo afea la imagen, sino que ni es operativo por razones climatológicas, ni mejora el anterior pavimento.
Desde Nueva Canarias, además, se afirma que la información que publica del Consistorio es “engañosa”, pues afirma que se han pintado las farolas, bien, pero solo hasta donde alcanzó el brazo del pintor encargado. Se distinguen claramente dos tonos de grises en todas y cada una de ellas.
El comunicado omite la información sobre la iluminación, pues a pesar de haber instalado unas 20 farolas led, con carga solar, a día de hoy sólo funcionan correctamente 3 de ellas.
Para Nueva Canarias, resulta “muy preocupante” el estado en el que se encuentra el muro de protección entre el paseo y la carretera, que ha sido sustituido por unos alambres en forma de jaula, que ya presenta síntomas de oxidación, con piedras dentro, generando una clara situación de inseguridad a los viandantes. Así mismo, la barandilla de acero galvanizado no ha mejorado la estética anterior, con un paseo que a tramos parece una cárcel, de barrotes low cost y en el que no hay ni una sola papelera.
La portavoz de Nueva Canarias, ante “el gran descontento que ha generado entre los
vecinos“ el modo en el que ha quedado el paseo, y dado que no parece que se hayan ejecutado todas las unidades de obra previstas en el proyecto inicial, ha solicitado copia de la certificación final de la obra para comprobar estos extremos.
Ademas, resulta “muy sospechoso” que, el Gobierno Municipal, “al que tanto gusta anunciar, inaugurar y fotografiarse con cualquier obra que ejecute, por pequeña e innecesaria que sea, haya optado en este caso por una publicación en prensa y una reseña en Facebook”, manifiesta la formación
Los hechos ponen de manifiesto que en esta actuación, “no todo es de color de rosa, y que el gobierno de Onalia Bueno, no ha querido inaugurar una obra que ha generado tanta polémica, desde el mismo momento en el que se tuvo que cerrar al tráfico por orden de la inspección de trabajo, para intentar evitar algún coste electoral”, sentenció Isabel Santiago.