El alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Augusto Hidalgo (PSOE), ha expresado este martes su determinación de trabajar por trasladar de su actual ubicación la Base Naval militar de la ciudad, que “tendrá que salir de ahí porque el planeamiento ya no lo permite”, según ha sostenido.
Pese a admitir que las necesidades de la defensa nacional podrían imponerse por encima de las normativas municipales, Hidalgo se ha mostrado convencido de que el desalojo de los céntricos terrenos del litoral que ocupa esa instalación de la Armada, reivindicado de forma recurrente durante décadas por distintos sectores políticos y sociales de la ciudad, podrá finalmente llevarse a cabo.
Y, además, ha subrayado que el Ayuntamiento exigirá que el gasto que suponga el traslado de la Base Naval “no pase por las arcas municipales”.
Ese es un gasto que “tendrá que costearlo el Gobierno central”, ha sentenciado a ese respecto el alcalde, que ha hecho estas declaraciones en una nueva edición del Encuentro de Líderes que organizan Editorial Prensa Canaria y la Cadena SER, a preguntas formuladas por el público después de que ofreciera una conferencia titulada Ciudades, la nueva frontera.
El socialista Augusto Hidalgo no ha apuntado, en todo caso, más detalles sobre el proceso o los plazos que conducirían a la desaparición de su actual ubicación de esas instalaciones militares.
Ya que, si bien la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal (PP), ha solicitado ya al Ayuntamiento designar una representación para participar en un grupo de trabajo que tiene previsto constituir para estudiar las posibles opciones de realojo de la Base Naval, desconoce cómo y a partir de qué momento se pondrá en marcha.
“No sabemos ni cuándo se va a convocar ni cuál es la composición exacta de esa comisión”, ha declarado.