El concejal de Ciudad de Mar del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, José Eduardo Ramírez, ha comentado este jueves en rueda de prensa que “es posible” que la contaminación de las aguas de la playa capitalina de El Confital se deba a “agua empozada” en algunos puntos.
El edil ha afirmado que para confirmar esta teoría el Consistorio quiere “hacer unas catas en puntos que están en la zona privada de la playa”, pero que ha sido imposible contactar con los dueños para que den el permiso“ porque el único modo de comunicarse con ellos es a través de un bufete de abogados que cierra en el mes de agosto.
Por eso, Ramírez ha dicho que ahora mismo el Gobierno municipal se encuentra “esperando” para realizar las catas porque “hasta septiembre” no se podrá contactar.
No obstante, ha añadido que la empresa Emalsa, de la cual un tercio es de propiedad municipal, “sigue trabajando con mucha intensidad” y llevando a cabo tareas en El Confital como “detectar y cambiar las tuberías viejas” o “colocar colorante para conocer de qué zonas parte la contaminación”.
Ramírez ha explicado que la contaminación de las aguas de la playa de El Confital “no es un problema nuevo” y que el Ayuntamiento “espera dar pronto con una solución”.